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Reforma

El Congreso de EE UU logra un acuerdo para endurecer las leyes sobre empresas

El proyecto, consensuado por la Cámara de Representantes y el Senado, supone una versión más dura que la planteada por la propia Casa Blanca y da luz verde a su aprobación antes del receso parlamentario de agosto.

La Cámara baja votará hoy el proyecto que endurece la vigilancia sobre las empresas consultoras, al impedir que presten nueve servicios específicos a las compañías que auditan, entre ellos los de consultoría.

Asimismo, crea un comité de supervisión de auditoría que, aun bajo el control del organismo regulador bursátil, la comisión del mercado de valores de Estados Unidos (SEC), tendrá una autoridad añadida sobre éste, ya que podrá recabar directamente documentación de las empresas. Las auditoras y la Casa Blanca se oponían a otorgar este grado de independencia al nuevo comité.

La reforma pactada también recoge la propuesta del Senado según la cual las firmas de contabilidad establecidas fuera del país estarán sometidas a la vigilancia de este comité de supervisión si trabajan para empresas estadounidenses. La Unión Europea ya anunció el martes su decisión de protestar contra esta medida, que otorga, según la Comisión, potestad a las autoridades estadounidenses para controlar a las empresas europeas que auditen a las compañías también europeas que coticen en Wall Street.

El proyecto consensuado por ambas Cámaras adopta la línea dura de la Cámara de Representantes en cuanto a las penas de cárcel para los responsables de fraude empresarial, que serán de un máximo de 25 años para los ejecutivos 'conocedores' de prácticas contables irregulares. 'La legislación que hemos pactado avanza en resolver los enormes problemas' que han salido a la luz con los recientes escándalos contables, dijo el presidente de la comisión de Servicios Financieros de la Cámara baja, Mike Oxley.

Arrestos en Adelphia

La sucesión de escándalos no parece haber terminado. La Corte Federal de Nueva York ordenó ayer el arresto del fundador de la empresa de comunicaciones Adelphia, John Rigas, de dos de sus hijos y de otros dos antiguos ejecutivos acusados de fraude bursátil por utilizar la empresa como 'un banco familiar' y propiciar la bancarrota de la sexta compañía de comunicación por cable.

La caída imparable de las Bolsas y su traslado a la economía real, a través de las dificultades financieras de las empresas y la caída de la renta disponible de las familias, han metido presión sobre las posiciones de una y otra Cámara respecto a la conveniencia o no de endurecer la legislación empresarial, después de semanas de discrepancias.

La Cámara de Representantes aprobó a principios de año un proyecto de ley menos restrictivo, tras el estallido del caso Enron, pero posteriores escándalos como los de Adelphia y Worldcom llevaron al Senado a aprobar una dura iniciativa de control a las auditoras, que ahora ha servido de base para unificar el proyecto con la Cámara baja.

Wall Street reaccionó ayer favorablemente al acuerdo del Congreso y registró valores positivos, después de cinco días de pérdidas.

Lo que no ha logrado el acuerdo es enterrar el enfrentamiento abierto entre demócratas y republicanos. Ayer el líder de la mayoría demócrata del Senado, Tom Daschle, volvió a pedir el cese del responsable del organismo regulador bursátil, Harvey Pitt, por pedir para la agencia rango de organismo ministerial 'cuando el regulador está en el ojo del huracán por su manejo de los escándalos empresariales'.

Según Daschle, Pitt no está cualificado para el cargo que ocupa.

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