El Defensor del Pueblo Europeo revela que la UE censura la opinión de los funcionarios
El Defensor del Pueblo Europeo, Jacob Söderman, ha reclamado que las publicaciones de los funcionarios de la Unión Europea no sean sometidas a censura antes de darse a conocer. En una carta enviada al vicepresidente de la Comisión, Neil Kinnock, Söderman opina que la abolición de la censura crearía 'un clima de mayor confianza y respeto en la seno de la Administración comunitaria' y, al mismo tiempo, 'sería prueba del cumplimiento efectivo de la Carta de Derechos Fundamentales'. El artículo 11 de dicho documento reconoce el derecho a la libertad de expresión.
El Defensor del Pueblo menciona en su misiva la situación de muchos de los Estados miembros que, dice, 'han vivido largo tiempo sin censurar a sus funcionarios, y de este modo han demostrado confianza en sus criterios'. Según él, ello ha conducido a un entorno 'más abierto en el que el debate se asienta en los hechos y la profesionalidad'.
Söderman recuerda también que este tipo de censura fue derogado en España y Portugal una vez que se abolió el régimen autoritario. En otros países tampoco existe, y en la unión sólo perdura en el Reino Unido y Grecia. En su opinión, la inmensa mayoría de los funcionarios europeos escriben artículos y pronuncian conferencias desde la máxima lealtad institucional.
Además, añade, la experiencia demuestra que los que son desleales ignoran de todas maneras las disposiciones restrictivas y publican sus escritos de todas formas. En cualquier caso, sugiere, esos individuos 'asumirán sus responsabilidades'.
En su último informe, publicado la semana pasada, el Defensor del Pueblo Europeo criticó duramente a las instituciones europeas por no respetar la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, suscrita por ellas: 'Debo lamentar que las instituciones que proclamaron la Carta todavía no parecen dispuestas a aplicarla en la práctica', y añadió que 'no tiene sentido hablar de dotar de carácter jurídico a la norma 'si no se tiene la intención de respetarla'.