El colapso en el Gobierno de Turquía hace peligrar el acuerdo con el FMI
La creciente debilidad de Ecevit, enfermo y con escaso apoyo en el Parlamento, parece abocar a Turquía a unas elecciones anticipadas que no gustan nada a los inversores. El dólar se mantiene en el entorno de 1,65 millones de liras, ligeramente por debajo de la cotización del lunes, pero un 27% más que a principios de año. El índice de referencia de la Bolsa de Estambul continuó su trayectoria de caídas y perdió un 1,8%; las pérdidas acumuladas en lo que va de año superan el 36,5%.
Las elecciones están fijadas para abril de 2004, pero los expertos dudan de que Ecevit, de 77 años y aquejado de graves problemas de salud en las cervicales, pueda llegar a cumplir su mandato. La líder del Partido de la Verdad, Tansu Ciller, se entrevistó ayer con el primer ministro, quien le comunicó su intención de permanecer al frente de la Administración. Sin embargo, el viceprimer ministro Devlet Bahceli apuntó el lunes el 3 de noviembre como fecha para los posibles comicios anticipados. Las declaraciones de Bahceli aceleraron la crisis de gobierno, que se saldó con la dimisión de otro viceprimer ministro, Husemettin Ozkan, considerado mano derecha de Ecevit.
La principal duda entre los inversores está ahora en la capacidad del Gobierno para sacar adelante las reformas pactadas con el FMI y de las que depende un crédito de 16.000 millones de dólares (16.160 millones de euros). Turquía aún se está recuperando de la peor crisis económica desde la II Guerra Mundial. El PIB se contrajo en 2001 un 9,4%, la caída se aceleró en el último trimestre, en el que se registró una contracción del 12,3%.
La incógnita sobre Dervis
El artífice de los acuerdos con el FMI es el superministro de Economía, Kemal Dervis, un ex vicepresidente del Banco Mundial. Sin embargo, las inestabilidades políticas están poniendo en serias dudas la capacidad del Gobierno para hacer frente a sus obligaciones de la deuda. El Estado tuvo que aceptar unos intereses del 80% en la última subasta de papeles a 238 días. La persistente caída de la lira también está disparando la inflación, lo que repercute en el consumo y, por tanto, en la actividad económica y la recaudación fiscal.
Desde el Partido Democrático de Izquierda, liderado por Ecevit, se especula con la posibilidad de que Dervis lidere la candidatura electoral. Hasta la fecha, el ministro ha declinado entrar en la política. Además, el apoyo popular a Dervis ha caído un 23% en los últimos meses, como consecuencia de que los problemas económicos del país siguen sin resolverse. Hace un año, el apoyo a Dervis era del 60%, muy por encima de cualquier otro miembro del Gobierno. 'Ahora, el ministro de Economía no es ninguna garantía de éxito', señalaba ayer un economista turco. Los analistas creen que la candidatura de Dervis sería más efectiva si logra el respaldo de Ozkan y del ministro de Exteriores, Ismail Cem.
Por otra parte, la crisis de liderazgo de Ecevit está siendo aprovechada por sus socios de gobierno del Partido de Acción Nacionalista (MHP), liderado por Bahceli, que controla 127 de los 303 asientos del Parlamento, y que ven ahora la posibilidad de lograr la mayoría absoluta en unos comicios adelantados. El Partido de Ecevit controlaba 97 escaños antes de la dimisión en bloque de 20 diputados. El Partido de la Madre Tierra es el tercer socio, con 79 escaños.
Los enfrentamientos dentro de la propia Administración han retrasado proyectos trascendentales de privatización de empresas estatales -eléctrica, tabaquera y de transportes-, exigidas por el FMI. Precisamente ayer llegó a Ankara una misión del Fondo para evaluar los progresos logrados en las reformas pactadas.