El consejo de Qwest fuerza la dimisión de su consejero delegado
Joseph Nacchio, copresidente y consejero delegado de la operadora telefónica estadounidense Qwest, hizo público ayer un comunicado en el que señalaba su deseo de emprender el camino que le brinde otras oportunidades laborales. Estas explicaciones se hicieron públicas después de que el consejo de la compañía le pidiera abandonar su cargo en la empresa.
Nacchio, de 52 años, cuyo contrato con vigencia hasta 2005 se renovó el pasado octubre ha sido presionado por un consejo en el que crecía la crítica por una deuda de 26.000 millones de dólares (27.545 millones de euros), una parte de la cual vence a finales de año y para la que la compañía necesita refinanciación. La operadora está en una delicada situación financiera al haber encadenado pérdidas durante ocho trimestres por la caída de los precios y de la demanda del cable de fibra óptica, una de las apuestas que Nacchio hizo de la empresa cuando hace dos años compró US West por 44.000 millones. Con esta compra la empresa se convirtió en el operador local líder en 14 Estados.
Pero además el negocio del cable de fibra óptica ha metido de lleno a la compañía en una investigación del regulador de los mercados (SEC) por la contabilidad que de los intercambios de capacidad con Global Crossing -ahora en suspensión de pagos- registraba en sus libros de cuentas. La empresa puede verse obligada a reformular sus resultados en los últimos años, lo que unido a la atmósfera de sospecha que se respira en Wall Street, el reemplazo en la dirección de la compañía se ha hecho necesario para ganar credibilidad según aseguran los analistas.
Con Nacchio sale de la empresa el copresidente de la empresa y mayor accionista, Philip Anschutz, quien le contrató en 1997. El lugar de ambos lo ocupará Richard Notabaert, consejero delegado de Tellabs y ex presidente de Ameritech. La salida de Nacchio es la segunda que se produce en el sector. Bernard Ebbers, de WorldCom, dejó su empresa en abril forzado por el consejo.