La CEOE pide que las empresas 'cumplan con su obligación de abrir'
La patronal CEOE recomendó ayer a todas las empresas que mantengan abiertos los centros de trabajo durante la huelga general del 20 de junio, con el doble objetivo de 'cumplir con su obligación de empresarios y permitir a los trabajadores que lo deseen poder ejercitar su derecho constitucional al trabajo'.
En una declaración institucional aprobada por el comité ejecutivo y la junta directiva de CEOE, la organización asegura que el derecho al trabajo no debe sufrir ningún tipo de impedimento, ni por la vía de coacciones de los denominados 'piquetes informativos' ni por la vía de imposibilitar el transporte a los distintos centros de trabajo.
En este sentido, los empresarios se muestran convencidos de que las autoridades cumplirán con su obligación de garantizar los derechos de todos los ciudadanos y exigen que se cumplan íntegramente los servicios esenciales y se sancione su incumplimiento.
Para la CEOE, la huelga general es un instrumento límite de las relaciones laborales democráticas que 'no ha sido concebido para ser dirigido contra los poderes públicos'.
Asegura que las peticiones de los sindicatos 'son de orden político y no empresarial', por lo que no pueden justificar una iniciativa como la huelga y 'menos aún si se utiliza para mantener un pulso con el Gobierno, sustituyendo las tareas que incumben a los partidos políticos y al Parlamento de la nación'.
La patronal dice que es la primera en desear que se supere rápidamente la actual situación de conflicto y la recuperación del hábito de diálogo social, 'que tantos frutos ha dado a España'.
Por eso considera 'lamentable' que en el caso de la protección por desempleo no se haya utilizado este cauce para conciliar las diferencias y se haya optado por acudir 'a la sinrazón de la convocatoria de una huelga general'.
'No sólo es preocupante el hecho en sí de la huelga, sino el momento elegido para su convocatoria, ya que coincide con acontecimientos importantes para España y su futuro, lo que comportará un daño desproporcionado en comparación con el que se produciría con la simple inactividad laboral'.
En este sentido, señala que las centrales sindicales convocantes deben ser conscientes de los efectos negativos que para la situación económica de España, y en particular del empleo, puede tener esta convocatoria.
Por eso, la patronal solicita al Gobierno que garantice el derecho y la libertad de trabajo con motivo de la huelga y que, mediante los medios oportunos, 'evite violencias o coacciones sobre empresas y trabajadores, manteniendo el orden público frente al lamentable espectáculo al que hemos asistido en ocasiones similares con los piquetes informativos'.
Asimismo, pide al Ejecutivo que se cumplan escrupulosamente los servicios señalados en los sectores esenciales de la comunidad, especialmente los referidos a abastecimiento, comunicación y libre circulación de personas.