El deflactor llega al 3,6%, y el coste laboral, al 3,5%
El producto interior bruto (PIB) valorado a precios corrientes ha registrado un crecimiento del 5,6% en el primer trimestre del año respecto al mismo periodo del año anterior, lo que supone que el deflactor implícito del PIB fue del 3,6%, dos décimas superior al registrado en el último trimestre de 2001. Esta aceleración de los precios implícitos supone un deterioro de la competitividad de los productos y servicios españoles. En cuanto al deflactor de las exportaciones, fue inferior al general, lo que supone cierto alivio para la competitividad de las ventas al exterior, aunque también experimentó un ligero deterioro respecto al último trimestre de 2001.
En cuanto a los costes, la remuneración se acelera en todas las ramas de actividad, y la remuneración por asalariado modera su avance al 4,2%, medio punto inferior al trimestre precedente. Así, el coste laboral unitario de la economía se desacelera aproximadamente en igual proporción y se sitúa en el 3,5%, una décima por debajo del deflactor implícito del PIB.
Por lo que se refiere a la productividad aparente del factor trabajo, creció un 0,7%.