La festividad de EE UU recorta el negocio en Europa
Los mercados europeos, huérfanos ante la falta de referencia de Wall Street, acusaron una importante caída de negocio ayer y cerraron alejados de los máximos del día. Las Bolsas de EE UU estuvieron cerradas por la celebración de Memorial Day, el recuerdo a los caídos en las guerras tras la independencia, y hoy retomarán su actividad.
El sentimiento de mercado, poco prometedor en una jornada semifestiva, recibió un impulso tras conocerse el repunte de la confianza empresarial en Alemania. El índice IFO subió hasta 91,5 en abril, igualando el máximo de 11 meses alcanzado en marzo. El índice de expectativas futuras también superó las previsiones, alentando así las esperanzas a una recuperación económica en la zona euro. Las principales plazas lograron avances moderados gracias a la fortaleza de las aseguradoras y el sector de la distribución.
Un sobresalto en la Bolsa de Francfort puso cierto nerviosismo a una sesión monótona y caracterizada por un volumen de negocio escaso, alrededor de un 25% inferior a la media.
Un falso aviso de bomba a las dos de la tarde provocó que las transacciones que se realizaban sobre el parqué de la Bolsa alemana se interrumpieran durante una hora, aunque las operaciones por medio de su sistema electrónico continuaron funcionando. Los dos edificios de la Bolsa de Francfort, el parqué, situado en el centro de la ciudad, y la sede administrativa, en la periferia, fueron evacuados.
Una vez normalizadas las operaciones, la sesión terminó con avances destacados en los sectores de la distribución y aseguradoras. La caída de las telecos contrarrestó las ganancias del día y, aunque los avances dominaron en las principales plazas, no faltaron algunas caídas. Así, Francfort ganó un 1,27%; París, el 0,54%; Milán, el 0,3%, mientras Londres (-0,63%) y Estocolmo (-0,3%) cayeron.
Carrefour animó al sector de la distribución gracias a una recomendación favorable de Deutsche Bank. La firma elevó la valoración a comprar y la francesa avanzó un 2,15%, una de las subidas más destacadas del Cac parisino en la sesión.
Las aseguradoras, por su parte, se beneficiaron de las buenas cifras que llegaron de Munich Re. La reaseguradora alemana ganó un 2,9% tras anunciar un beneficio neto de 4.500 millones de euros en el primer trimestre. Axa (+1,17%) también animó al sector tras una recomendación favorable de Bank of America.
Las telecos volvieron a ser las grandes perdedoras del día. Vodafone cayó con fuerza. Perdió el 7,08%, ante el temor que suscitan los resultados de las operadoras que se conocerán hoy. Los expertos prevén pérdidas históricas y barajan unos números rojos que rondan los 15.000 millones de libras (23.700 millones de euros).
France Télécom, contagiada, perdió un 3,09% un día antes de su junta de accionistas, mientras Deutsche Telekom, una de las escasas excepciones del día, subió un 4,18%. Anunció un recorte de plantilla en 22.000 trabajadores para final de 2004.
Hugo Boss sufrió otra caída destacada. Perdió un 6,17% penalizada tras una alerta sobre beneficios.
El presidente argentino, Eduardo Duhalde, se reunió ayer con los gobernadores de su partido y llegó a un acuerdo para aprobar las reformas que le pide el FMI sobre la reducción del déficit público en una semana. Los senadores debatirán hoy la Ley de Subversión económica. Entre tanto, la Bolsa argentina encadenó el sexto retroceso consecutivo. Perdía un 0,97% a poco del cierre.
Los mercados asiáticos arrancaron la semana sin apenas variación. El Nikkei tras mantenerse al alza la mayor parte de la jornada repitió cierre, con lo que se mantiene en 11.976,35 puntos. En Hong Kong el Hang Seng cerró con un caída del 0,53% arrastrado por la banca. El Gobierno del país contribuyó al retroceso después de predecir una fuerte caída de beneficios en el sector bancario.