Berlusconi estudia fórmulas para intervenir en auxilio de Fiat
Apreguntas de los periodistas sobre la crisis de Fiat, Berlusconi declaró que 'el Gobierno examinará las posibilidades de intervención pero sin incluir medidas que puedan violar la libertad de mercado y la competencia'. El primer ministro, que se refirió a Fiat como el más importante grupo privado del país, eludió comentar una posible venta del fabricante de automóviles a General Motors y recordó que todo el sector atraviesa dificultades desde el 11-S.
Paolo Cantarella, consejero delegado del grupo, confirmó que el resultado operativo de Fiat Auto será este año similar al del año pasado, cuando fue negativo en 549 millones de euros. Las ganancias del resto de divisiones del grupo deberían compensar esa pérdida para cumplir el objetivo de cerrar 2002 con equilibrio operativo.
Fiat Auto planteó ayer a los sindicatos la supresión de 2.887 empleos, 2.442 de ellos en Italia, la mayoría en el área de Turín. Además la producción bajará en junio en 14.700 vehículos, lo que implicará una suspensión de empleo para unas 17.000 personas.
Los sindicatos rechazaron negociar esa propuesta y preparan la convocatoria de paros de dos horas por turno como medida de protesta. El ministro de Trabajo, Roberto Maroni, ha convocado para hoy a representantes de Fiat para analizar la situación.
Fiat anunció el martes que venderá en Bolsa parte del capital de Ferrari -un máximo del 40%- dentro de su plan para reducir su deuda a la mitad. También las filiales Magneti Marelli y Teksid se encuentran en venta total o por partes, mientras que Case New Holland (CNH) tiene en marcha una ampliación de capital de 1.650 millones.