Bruselas prevé un crecimiento para la eurozona del 1,4% en 2002
El Ejecutivo comunitario publicó hoy sus previsiones económicas para el período 2001-2003, en las que pronostica para el conjunto de la Unión Europea un crecimiento este año algo superior al de la eurozona, y lo sitúa en el 1,5%.
Bruselas pronostica que en el 2003 el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) tanto de la eurozona como del conjunto de la Unión Europea será del 2,9%, después del impulso que prevé para el último trimestre de este año.
Las previsiones de crecimiento para este año son inferiores a las cifras alcanzadas en el 2001 (1,6 y 1,7%, para la eurozona y los Quince, respectivamente) y significan una ligera variación al alza de los pronósticos que la Comisión Europea anunció el pasado noviembre (de una y dos décimas, en cada caso).
Bruselas espera que el crecimiento medio del consumo privado en la eurozona alcance el 1,2% este año y el 2,5% en el 2003, que la inflación se mantenga en torno al 2,2% (frente al 2,5% del 2001) y reconoce que la introducción del euro el pasado 1 de enero aportó 0,16 puntos porcentuales al aumento de precios durante ese mes.
En cuanto al empleo, espera que en la eurozona se crearán en el 2002 y 2003 un total de 1,8 millones de puestos de trabajo, pero el índice de desempleo aumentará en el 2002 al 8,5%, desde el 8,3% del año pasado.
La Comisión espera que el precio del petróleo, influido por las crisis en Oriente Medio y Venezuela, alcance de nuevo una media de 23,8 dólares por barril para el Brent del Mar del Norte, frente a los 25 dólares de 2001.
En su análisis de la economía internacional, la Comisión estima que esta crecerá en 2002 un 2,9% y alcance el 3,9% en el 2003.
Asegura que la caída de la confianza económica causada por los ataques terroristas de septiembre en Estados Unidos tuvo una duración breve.
Además de presentar sus previsiones económicas, la Comisión anunció sus Orientaciones Generales de Política Económica, en las que aconseja proteger la estabilidad, que los déficit presupuestarios no superen el 3 % del PIB y que se dé un "comportamiento responsable" de los interlocutores sociales en materia salarial.
Cita los casos de Alemania, Francia, Italia y Portugal, países a los que pide que se esfuercen más para alcanzar el equilibrio presupuestario o superávit "como máximo en 2004".
Pero en sus previsiones, la Comisión indica que los déficit públicos de Alemania y Portugal se aproximarán al 3 % (límite impuesto en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento) y pronostica que serán del 2,8% para el caso alemán y del 2,6% en el portugués, mientras que para Francia espera un 2%.
"Los aumentos de los salarios nominales deben ser compatibles con la estabilidad de los precios", advierte Bruselas en su informe.
La Comisión recomienda un aumento de la productividad, aboga por una mayor integración de los mercados de productos -como las redes de energía y de comunicaciones- que se acelere la integración de los mercados financieros y que se aplique una "política vigorosa de reducción del desempleo".
Por último, Bruselas pide a los Estados miembros que fomenten el desarrollo sostenible y la cohesión social y regional y que afronten el reto del envejecimiento progresivo de sus poblaciones.