Leo Kirch podría abandonar la dirección del grupo tras la suspensión de pagos
El magnate alemán de medios de comunicación, Leo Kirch, está dispuesto a retirarse de la dirección de su grupo tras declararse éste hoy en suspensión de pagos, aseguró hoy el consejero de la compañía encargado de la reestructuración de Kirchmedia, Wolfgang van Betteray. Además de Leo Kirch, que fundó su entidad hace 50 años, su más cercano colaborador y el principal responsable de los desajustes financieros de Kirchmedia, Dieter Hahn, podría dimitir de su cargo ante las acusaciones que esta recibiendo.
Las arcas de Kirch se vaciaron del todo tras acumular deudas por valor de 6,5 billones de euros, en concepto del pago de elevados derechos cinematográficos y una mala gestión de su televisión de pago. La declaración de insolvencia deja a la compañía en manos de la administración pública.
El holding Kirch, que posee el mayor archivo cinematográfico de Europa, se compone de Kirch Media, Kirch Pay TV y una sociedad de participaciones.
A través de Kirch Media, el consorcio posee derechos de retransmisión deportiva, empresas de producción, un 52,52% de participación en los canales alemanes de televisión ProSieben Sat 1 Media y un 25% en la cadena española de televisión privada Telecinco.
En Kirch Pay TV, la división de televisión de pago, se encuentran, entre otros, Premiere World, que pierde 1,13 millones de euros al día, Call Center y el canal especializado Discovery Channel.
Los acreedores, optimistas sobre futuro el de Kirch
Los bancos acreedores y los nuevos responsables del consorcio de medios de comunicación alemán Kirch, que hoy se declaró insolvente, son optimistas sobre el futuro de la compañía, que adeuda 6.500 millones de euros. En una rueda de prensa pocas horas después de la suspensión de pagos de KirchMedia, la sociedad que agrupa los negocios básicos del grupo, los nuevos administradores de la compañía señalaron que ésta no será fragmentada y que lograrán salvarse la mayor parte de sus 5.500 puestos de trabajo.
Por su parte, los bancos acreedores afirmaron que los responsables de la situación en la que se encuentra el consorcio de comunicación "son los accionistas de KirchMedia" y se mostraron dispuestos a proporcionar nuevos créditos al grupo.
El principal acreedor es el banco bávaro Bayern LB, con 1.900 millones de euros, seguido de Dresdner Bank con 460 millones de euros y el HypoVereinsbank, con 450 millones de euros. Wolfgang Hartmann, representante de Commerzbank, otro de los acreedores del grupo, dijo en la rueda de prensa que la declaración de insolvencia "no supone un final, sino solo un punto de inflexión".
Van Betteray no descartó que tras la declaración de insolvencia se produzca una entrada de grupos extranjeros en el consorcio y confirmó el interés de compañías de fuera de Alemania por algunas divisiones de KirchMedia.
Entre estos interesados se situaría el magnate australiano de medios de comunicación de origen australiano Rupert Murdoch y los grupos italianos Fininvest y Mediaset, ambos propiedad del presidente italiano Silvio Berlusconi.
News Corporation, propiedad de Murdoch, tiene una participación del 2,48% en KirchMedia, mientras Berlusconi posee un 4,96% a través de Mediaset y Fininvest.
Van Betteray, que cifró las deudas de KirchMedia en 1.400 millones de euros, afirmó que la firma necesita unos 800 millones de euros para medidas de saneamiento y reestructuración, cantidad que debería lograrse mediante una ampliación de capital.