El español compra con tarjeta la mitad que la media europea
España es uno de los países europeos con más tarjetas por habitante (1,63), pero, paradójicamente, sólo el 11% de las compras se pagan con dinero de plástico, la mitad del promedio en Europa, que es del 22%. BBVA y Caja Madrid quieren competir en segmentos aún poco maduros: el pago aplazado y las tarjetas de empresa.
España tiene una de las medias más altas en número de tarjetas de la Unión Europea: 1,63 por habitante, frente al promedio europeo de 1,2, según datos del BBVA. Sin embargo, es el quinto por la cola en volumen de compras con dinero de plástico. No llegan a 2.000 euros por persona al año, frente a la media de casi 3.000 euros.
Sólo el 10,9% de las compras en comercios españoles se abona con tarjeta, es decir, la mitad de la media europea, que está en el 22%.
Las entidades financieras son conscientes de que la mayoría de los clientes prefiere sacar dinero de los cajeros para pagar sus compras en vez de utilizar la tarjeta. Lo achacan a un hábito cultural. En el Reino Unido, por ejemplo, el uso del dinero de plástico es masivo. Este país está a la cabeza en gasto por persona: 6.000 euros al año, el triple de la media europea.
La banca quiere dinamizar este mercado. Las vías son buscar segmentos que aún están poco maduros (aunque no así en el resto de Europa) y ofrecer condiciones competitivas que atraigan al cliente.
Con este objetivo, el BBVA lanza hoy una nueva tarjeta de marca Visa, la Nova Oro, de pago aplazado o revolving, un área poco desarrollada en el mercado español. Va dirigida a un segmento medio y medio-alto, pero con la ventaja de es gratuita, ya que no tiene comisión anual, y devuelve al titular el 1% de las compras realizadas. El BBVA tiene 250.000 tarjetas emitidas de pago aplazado (el 10% de las de crédito) y con la Nova Oro espera captar 100.000 clientes este año.
Débito para empresas
Con el revolving, el cliente puede pedir un crédito que se le concede automáticamente a un determinado tipo de interés, normalmente más alto que el de un préstamo personal. 'Pero no creo que el interés sea el obstáculo que impide el desarrollo del pago aplazado', señaló ayer José Manuel Tamayo, director de negocio de banca comercial.
Caja Madrid se ha lanzado a competir en el segmento de empresas con la segunda tarjeta de débito del mercado. La Caixa ya emite una. La de Caja Madrid será gratis este año y luego tendrá una cuota anual de 12 euros. Está destinada a las compañías que quieren tener un control diario y mensual de los gastos de sus empleados. Permite fijar una cantidad límite de gasto en cada tarjeta.
El comercio busca bajar las comisiones
Los comerciantes siguen protestando porque consideran que las entidades financieras les cobran unas comisiones abusivas por los pagos que se hacen con tarjeta. Dicen que incumplen los límites máximos del 3% en las comisiones que abonan. Este tope se recoge en el acuerdo de reducción progresiva al que llegaron diversas asociaciones de comerciantes y la banca en 1999, bajo el auspicio del Gobierno. A partir del próximo julio será el 2,75%.
Precisamente, la entidad financiera Caja España y la Asociación Vallisoletana de Comercio (Avadeco) firmaron ayer un convenio por el que sus asociados pagarán un 0,25% menos de cuota por el pago con tarjetas. De esta forma se anticipan al tope fijado para julio, informa Manuel Rodríguez.
Al margen de los topes generales acordados y salvo que haya un convenio específico, es cada establecimiento el que negocia con su banco o caja. El resultado es desigual porque las grandes superficies logran comisiones muy bajas y los pequeños comercios, con menos capacidad de presión, las más altas.