El consejo de HP expulsará al disidente Walter Hewlett
Walter Hewlett dijo que quería seguir siendo consejero de Hewlett-Packard, una compañía que su padre ayudó a fundar, pero sus compañeros han decidido que este deseo no se cumpla después de la polémica mantenida por la compra de Compaq. El consejo de la empresa ha decidido que Hewlett no formará parte de este órgano después de que éste denunciara a la compañía la semana pasada por presunta presión sobre Deutsche Bank para que cambiara el sentido de su voto en la junta que votó la operación de compra.
La junta de la empresa en la que se tiene que votar la salida de Walter Hewlett está prevista para el día 26 de este mes. 'Sus recientes acciones han violado los principios básicos de la confianza y sus relaciones adversas con la compañía ponen en peligro la posibilidad de que el consejo pueda realmente hacer su labor', dijo ayer Sam Ginn, presidente del consejo y del comité de gobierno en un comunicado.
Los consejeros del fabricante de impresoras han admitido que la denuncia que presentó Walter Hewlett ante los tribunales el pasado miércoles les sorprendió incluso después de la dura campaña que ha presentado frente al resto de los consejeros por la compra de Compaq. Walter Hewlett y su familia, que cuentan con el 18% de las acciones de HP, votaron en contra de la fusión en la junta que tuvo lugar el 19 de marzo y ha hecho campaña para que esta operación se rechace. Los resultados de esta consulta aún no son públicos y se tardará varias semanas en conocer si los accionistas dan su luz verde a una operación cuyo valor ha descendido de los 25.000 millones de dólares (cuando fue anunciada en septiembre) a 19.400 millones (por ser un intercambio de acciones).
A pesar de no saberse nada sobre la votación, la presidenta de la empresa, Carly Fiorina, dijo que el voto afirmativo había ganado por un margen 'estrecho pero suficiente'. Los votos de Deutsche Bank pueden haber sido definitivos, de ahí el interés de Hewlett por anularlos.