Vallehermoso duplicará su actual tamaño en cuatro años gracias a la invesión de 2.068 millones hasta 2005
Vallehermoso prevé duplicar su tamaño actual en los próximos cuatro años gracias a la inversión de 2.068 millones de euros prevista en el Plan Estratégico diseñado para el periodo 2002-2005, y que en su mayor parte se destinará al área de promoción del grupo, informó hoy el presidente de la inmobiliaria, Rodrigo Echenique.
Echenique, durante su primera comparecencia como presidente de la inmobiliaria del grupo Santander Central Hispano ante la junta general de accionistas, apostó así por mantener el crecimiento vegetativo de la sociedad.
No obstante, aseguró que Vallehermoso estará en "primera línea de salida" y "estudiará cualquier movimiento corporativo que venga a consolidar su posición" en el proceso de consolidación que, en su opinión, las empresas del sector, tanto de España como del resto de Europa, protagonizarán "tarde o temprano".
Mientras tanto, el consejo de la inmobiliaria apuesta por desarrollar su programa inversor basándose en su actual plan de negocio, centrado en continuar diversificando su presencia geográfica y sus líneas de actuación con el fin de dotarse de la flexibilidad necesaria para sortear los ciclos del sector.
Previsión de beneficios
Así, en el 2005, en el horizonte de aplicación del plan, la inmobiliaria prevé obtener un beneficio atribuible de 236 millones de euros, lo que supondrá incrementar en un 21 por ciento el de 195 millones previsto para el presente ejercicio.
El mantenimiento futuro del "equilibrado y sostenido crecimiento" que, según Echenique, viene desarrollando Vallehermoso, se sutentará también en las "favorables perspectivas" que, a su juicio presenta el sector en España.
Además, Echenique estima muy positiva la prevista desaceleración del mercado residencial para el presente ejercicio, al considerar que permitirá "normalizar" los incrementos de oferta y demanda registrados en los últimos años.
No obstante, el presidente de Vallehermoso criticó el "desfavorable" trato fiscal que, a su jucio, padece la vivienda y solicitó la modificación tanto del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) como del de Transmisiones Patrimoniales que afectaban a estos activos inmobiliarios, así como la introducción de incentivos fiscales al alquiler de vivienda.