El Nasdaq y las 'telecos' lastran los mercados europeos
Los mercados europeos encadenaron en febrero el segundo mes consecutivo de debilidad. Los excesos de los últimos meses de 2001 siguen pasando factura. A ello se ha sumado el llamado efecto Enron, guinda para que los inversores hayan decidido 'esperar y ver'. Las altas cotas de volatilidad que han registrado las Bolsas del mundo en el mes son una prueba de que los índices se han movido, en gran medida, guiadas por operaciones intradía.
El mercado tecnológico Nasdaq fue uno de los más penalizados por el nerviosismo. El índice bajó en el mes algo más del 9%. El Dow Jones, por contra, ganó cerca del 2,8%.
La debilidad de la nueva economía se ha dejado sentir en las Bolsas europeas, que finalizaron febrero con caídas o mínimas ganancias. Francfort perdió en el periodo un 1,3%; Londres bajó el 1,24%, y Amsterdam, un 1,2%. Entre los avances, Madrid se anotó un 1,06%, y París, un imperceptible 0,03%.
Aumenta el nerviosismo
Al ambiente poco propicio, con unas valoraciones consideradas excesivas dadas las perspectivas de beneficios, se ha añadido una crisis de confianza sin precedentes, a raíz de la quiebra de la energética estadounidense. Las sospechas sobre los balances de las compañías se ha cebado precisamente con aquellas firmas que mantienen mayores niveles de endeudamiento y, por tanto, tiene más incentivos para ocultar, o al menos, maquillar, sus cuentas.
Las telecomunicaciones han sido las primeras víctimas de las sospechas. Además de los recelos generales, el sector ha vivido en propias carnes la quiebra de la estadounidense Global Crossing y la británica Carrier1. Energis podría ser la siguiente. La operadora alternativa cedió el 80% en el mes. Entre las grandes, France Télécom fue la peor en febrero. Bajó el 18%.