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Medio Ambiente

Drace contratará este año obras hidráulicas por 69 millones

La compañía del Grupo Dragados dedicada al tratamiento de aguas aumentará sus contrataciones desde los 63 millones de 2001 hasta 69 millones este ejercicio en un mercado del que capta el 10%. Ahora tiene sus miras puestas en Melilla, Cartagena, Almería, así como en el mercado brasileño.

Drace es la empresa del grupo Dragados encargada de desarrollar y construir instalaciones destinadas y relacionadas con el tratamiento de aguas. Trabaja en las áreas de medio ambiente, aguas para la industria y para el consumo, basando su actividad en la reutilización, el compostaje de aguas residuales, la cogeneración en depuradoras, el secado térmico y la desalación.

Su trayectoria comenzó en los años setenta como división medioambiental. A partir de 1999 pasa a ser empresa participada dependiente de construcción. El gran impulso para todo el sector llegó en 1995 con el Plan Nacional de Saneamiento y Depuración de Aguas y ahora el Plan Hidrológico Nacional (PHN) supondrá otra inyección.

El crecimiento de la compañía ha ido acompañado de obras singulares y ya forma parte del club de empresas que capta más del 40% de un mercado integrado por Cadagua, Pridesa, SPA, Infilco y Degremont. Drace absorbe hoy el 10% del pastel. El pasado año, sus contrataciones alcanzaron los 63,2 millones de euros (10.500 millones de pesetas) y para este ejercicio las previsiones apuntan hacia los 69,2 millones de euros (11.500 millones de pesetas).

Entre sus obras más significativas destacan además de la depuradora de Valladolid, que ha supuesto inversiones por 36 millones de euros (6.000 millones de pesetas), las plantas de Murcia, Logroño, Palencia, Zamora y Santander. Sin embargo, el director del área de Medio Ambiente de Drace, Fernando García Arribas, presume de su presencia en la planta más importante de las que se construye en España, la del Baix Llobregat, dividida en dos bloques, uno de los cuales corresponde a la compañía y donde se han invertido 150 millones de euros (25.000 millones de pesetas).

En materia de desalación, su objetivo es 'saltar desde Canarias a la Península' y sus miras están puestas en las instalaciones que han salido a concurso en Melilla, Cartagena y Almería.

Respecto al polémico precio del agua desalada, el responsable de Drace sitúa entre 0,30 y 0,30 euros (entre 50 y 60 pesetas) el coste de explotación del metro cúbico. La empresa pone especial hincapié en que 'la gente no es consciente de que el agua es un bien escaso', por lo que aboga por acercar su precio real al que pagan los consumidores. Augura que, 'al final, el precio del agua irá subiendo porque tenemos los mismos recursos y somos más'.

Al mismo tiempo, reconoce que 'el agua es cada vez más cara y de peor calidad'. Como aliciente, destaca la incorporación de nuevos socios a la UE. Para hacer frente a los mercados internacionales, Drace se apoya en la gran estructura de Dragados. Con ella han desembarcado en Argentina, Chile, Brasil, Honduras, Egipto, Argelia, Portugal y Marruecos, donde han presentado ofertas para la puesta en marcha de depuradoras y desaladoras.

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