Los bancos acreedores del grupo Kirch barajan entrar en el capital
El grupo Kirch, el mayor consorcio alemán de medios de comunicación y propietario de un 25% de Telecinco, vive sus horas más bajas. Los bancos acreedores no descartan ahora una entrada en el capital de la empresa, que también baraja la venta del 40% que tiene de la editora Axel Springer al grupo financiero Hypovereinsbank.
Rolf E. Breuer, presidente del Deutsche Bank, primer banco de Europa y uno de los acreedores la deuda del grupo se cifra en 6.000 millones de euros, manifestó la semana pasada que ¢el sector financiero no está dispuesto a poner a disposición de Kirch nuevos recursos, a menos que cambien las condiciones¢. Se trata de una declaración poco habitual, ya que los banqueros no suelen referirse en público a la liquidez de sus clientes y se ha interpretado como un mensaje tanto al propio Kirch como a sus competidores y al Gobierno alemán, muy interesado en que el gigante de la comunicación no pase a manos extranjeras. Sin embargo, la situación se está complicando y los bancos, según la prensa alemana, no descarta entrar en el capital a cambio de cancelar créditos.
Se estima que el consorcio alemán debe unos 615 millones de euros a Deutsche Bank, alrededor de 2.200 millones al Bayerische Landesbank, algo menos de 500 al Hypovereinsbank, 460 millones al Dresdner Bank y 350 a JP Morgan, además de unos 1.280 millones a otras entidades. Aparte del Deutsche Bank, los demás bancos se han mostrado cautelosos sobre la deuda de Kirch, si bien el Dresdner Bank ha manifestado que no prolongará el pago de su crédito de 460 millones, avalado con la participación del 25% en Telecinco, más allá del mes de abril.
El grupo deberá además hacer frente en los próximos meses a diversos compromisos financieros que no puede cumplir. Así, la editorial Axel Springer está dispuesta a ejercer una opción de venta por un paquete de acciones del 11,5% en la cadena alemana de televisión ProSiebenSAT.1, propiedad de Kirch. El grupo Kirch tendría que desembolsar alrededor de 750 millones de euros, una cantidad exorbitada dada su situación.
Paralelamente, el magnate de la comunicación de origen australiano Rupert Murdoch quiere ejercer otra opción de venta de su paquete del 22% en el canal de televisión de pago alemán Premiere. En este caso, la cantidad a pagar podría exceder los 1.500 millones de euros.
Ayer, el Financial Times indicaba que el grupo baraja la venta de activos por valor de 1.000 millones de euros para aliviar sus marchitas finanzas. En medios financieros germanos se teme que la precaria situación del grupo acabe en una declaración de insolvencia y permita a un inversor extranjero poner un pie en el mercado de la comunicación alemán. Se cita al grupo francés Vivendi Universal y al estadounidense AOL Time Warner, pero es sin duda el consorcio de Rupert Murdoch el que más "suena" en la prensa alemana. El diario Frankfurter Allgemeine Zeitung sostiene, incluso, que Murdoch ha encargado a una empresa auditora la elaboración de un informe sobre Kirch.
Una solución nacional
Para evitar que el consorcio germano caiga en manos extranjeras, la prensa alemana ha hablado incluso de una reunión secreta entre el canciller, Gerhard Schröder; el presidente del Deutsche Bank, Rolf E. Breuer, y los responsables de las empresas de comunicación Bertelsmann y Westdeutsche Allgemeine Zeitung (WAZ) para solucionar la crisis de Kirch e impedir, principalmente, la entrada de Rupert Murdoch en la compañía.
En esta posible solución, el magnate Leo Kirch tendría un papel minoritario y su imperio de medios de comunicación podría ser dividido para evitar problemas con las autoridades antimonopolio. Los bancos acreedores de Kirch podrían, incluso, entrar en el capital del grupo de comunicación, según algunos medios.
El canciller Gerhard Schröder podría tener un gran interés en mantener a Murdoch apartado del grupo Kirch. La clave está en la participación del 40% de Kirch en la editorial Axel Springer, que controla, entre otros, el diario sensacionalista Bild, el más vendido de Alemania. El canciller no puede ganarse las simpatías del diario más leído del país, pero sí puede evitar que la situación empeore.
Ayer, fuentes financieras no identificadas confirmaron a la agencia Reuters que el grupo financiero Hypovereinsbank ha ofrecido 1.000 millones de euros por el paquete de Axel.