La Bolsa apuesta por una contraoferta sobre Cantv
Los títulos de la operadora cerraron el viernes a 25,69 dólares en la Bolsa de Nueva York (están suspendidos en la de Caracas), un precio un 7% superior a los 24 dólares que ofrece la eléctrica estadounidense AES en su OPA hostil.
Los inversores de la telefónica venezolana Cantv están apostando porque se desate una guerra de ofertas sobre la compañía. Los títulos de la operadora cerraron el viernes a 25,69 dólares en la Bolsa de Nueva York (están suspendidos en la de Caracas), un precio un 7% superior a los 24 dólares que ofrece la eléctrica estadounidense AES en su OPA hostil.
De hecho, las acciones de Cantv ya cerraron por encima del precio de la OPA el jueves, el día que se lanzó, y el viernes mantuvieron la cotización.
No hay ninguna previsión de que AES vaya a elevar los 24 dólares por título que ofrece en efectivo. Así que la explicación a este hecho es que los accionistas no acaban de creerse que una multinacional de la electricidad sin ninguna presencia en telecomunicaciones quiera realmente quedarse con el ex monopolio venezolano. La participación de AES en el sector se reduce al 6,9% que tiene en Cantv a través de La Electricidad de Caracas (EDC), un porcentaje que ha intentado vender en el pasado.
Por eso, los inversores están apostando a que la OPA tenga el efecto que ellos creen que busca AES y que los accionistas más relevantes de Cantv (GTE/Verizon y Telefónica) lancen una contraoferta para no quedarse sin la compañía.
El complejo entramado accionarial del ex monopolio es el causante de esta situación. Cantv está controlada por un consorcio llamado Venworld que no tiene la mayoría, pero sí la gestión. A su vez, este grupo esta formado por varias compañías (GTE/Verizon, Telefónica, AT&T) y el mando está en manos de la primera.
Pero el equilibrio de fuerzas es débil. Telefónica no está cómoda participando en una compañía que no controla, pero vender la participación implica renunciar al mercado venezolano, ya que la ley impide que pueda competir en solitario durante dos años. Comprar la compañía supone un elevado desembolso (casi medio billón) e implica asumir riesgos. GTE, por su parte, preferiría controlar Cantv sin voces disidentes en el consejo de administración.
La situación ha sido tensa desde enero, cuando terminó la restricción que impedía a los socios de Venworld intercambiar acciones. EDC fue la primera en intentar vender, pero los dos potenciales compradores (GTE y Telefónica) sólo pueden hacerlo si lanzan una OPA por la totalidad.