_
_
_
_

Alemania permite que las empresas de nuevo móvil compartan red

La decisión de la Oficina Reguladora de las Telecomunicaciones en Alemania de permitir la cooperación entre las operadoras en el establecimiento de la red de telefonía móvil de tercera generación (UMTS) supondrá al Grupo 3G -el consorcio formado por Telefónica Móviles (57,2%) y la finlandesa Sonera (42,8%)- un ahorro de hasta 1.860 millones de euros (310.000 millones de pesetas), según fuentes del sector.

En el dilema entre los altísimos costes de la nueva telefonía móvil y la posible infracción a la libre competencia que podrían acarrear las alianzas, el regulador alemán optó ayer por una postura flexible frente a las empresas de telecomunicaciones, en una decisión que supone un precedente para el resto de los países europeos.

Su presidente, Matthias Kurth, anunció que las operadoras podrán compartir buena parte de los equipos necesarios para suministrar UMTS, entre ellos no sólo las antenas y las torres -lo cual ya venía sucediendo en el actual estándar GSM-, sino también las llamadas estaciones base, que son los puntos nodales de la red. Los nuevos desarrollos informáticos, según Kurth, deberán posibilitar que las redes se dirijan de manera autónoma, aun cuando compartan infraestructuras neurálgicas.

El regulador alemán insistió en que los términos de la subasta del verano pasado siguen vigentes y, por tanto, cada una de las seis operadoras que obtuvo una licencia tendrá que mantener la "soberanía" sobre su red. Asimismo, se mantiene la prohibición de que las compañías se repartan la cobertura.

Las licencias fueron concedidas con la imposición de garantizar hasta 2003 el acceso al nuevo servicio del 25% de la población alemana (50% en 2005). Para ello, está permitido establecer acuerdos de itinerancia. El Grupo 3G, que hasta ahora no cuenta con una red propia, ha firmado ya uno de estos acuerdos, que le garantizará el acceso a las redes GSM y GPRS de E-Plus (respaldada por KPN)

Telefónica en el pasado había estimado en 6.200 millones de euros (1 billón de pesetas) los costes que, a lo largo de los próximos 10 años, tendrá que afrontar 3G para desplegar la red en Alemania.

Las fuentes consultadas estiman que la cooperación con algunas de las seis operadoras que ofrecerán sus servicios podrá suponer ahorrar entre el 25% y el 30% de la inversión (entre 258.000 y 310.000 millones de pesetas). Varias casas de análisis coinciden con esta estimación. Un informe de Banc of America califica de buenas noticias para Telefónica la decisión alemana y calcula que podrá ahorrarse el 28% de la inversión prevista. UBSW, por su parte, cifra el ahorro en el 25% en los primeros cuatro años.

Reacciones dispares

El consejero delegado de 3G, Ernst Folgmann, habló ayer de "un potente impulso" para desarrollar la telefonía móvil en Alemania. La decisión fue saludada también por Mobilcom (France Télécom), E-Plus (KPN) y Viag Interkom (BT). En especial KPN y BT han acusado en los últimos meses en sus cuentas de resultados los altos costes del UMTS.

Los líderes del mercado Mannesmann Mobilfunk (Vodafone AirTouch) y T-Mobile (Deutsche Telekom), en cambio, reaccionaron con bastante más cautela: "Esto no es como para ponerse eufóricos", advirtió Rene Obermann, de Deutsche Telekom. Por partes iguales, ambos grupos controlan cerca del 80% de la telefonía móvil alemana actual, lo cual los coloca en una posición de privilegio de cara al UMTS.

Tanto Vodafone como Deutsche Telekom han dejado entrever recientemente que incluso podrían entablar demandas judiciales en contra de una cooperación que, a su juicio, resulte excesiva.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Más información

Archivado En

_
_