Los ataques israelíes encrespan las protestas de los palestinos
Israel no consigue atemorizar a los palestinos con su estrategia militar. Por el contrario, cuanto más recrudece sus ataques, más consigue encrespar los ánimos palestinos y las manifestaciones de protesta. Tras una semana de ataques con misiles por parte del ejército israelí, unos 10.000 palestinos, según Reuters, tomaron ayer las calles de la ciudad de Nablus para protestar por la oleada de violencia.
La respuesta de Israel no se hizo esperar y las tropas dispararon a los manifestantes y mataron a cuatro palestinos, según fuentes hospitalarias. Otro palestino murió de un disparo en la cabeza después de que unas 1.000 personas marcharan sobre Ramallah. El número de heridos superó con amplitud los 30.
El aumento de la violencia esta semana ha llevado a la comunidad internacional a pedir a las partes que pongan fin a la violencia. La Unión Europea emitió ayer una nota en la que aseguraba que "no hay solución militar" para el conflicto y que sólo reanudando el proceso de paz "se pueden crear las condiciones para una mejora de la situación de seguridad" y comenzar el camino de la normalización.
Para la UE es también esencial que ambas partes reanuden la cooperación en los aspectos de seguridad.
El pasado jueves, Bush acusó al líder palestino Yasir Arafat de no hacer lo suficiente para poner fin a la violencia y le pidió "alto y claro" una actuación decidida en favor de la paz.
Los dirigentes de la Autoridad Nacional Palestina criticaron ayer a Estados Unidos por rehuir su papel en el proceso de paz y pidieron a su presidente, George Bush, que "por una vez se ponga del lado de las víctimas".
Un dirigente israelí aseguró ayer que Jordania y Egipto han elaborado un plan conjunto para sacar el conflicto de Oriente Próximo de la actual parálisis. Los dos países han discutido el documento con EE UU, aunque éste no ha dado hasta ahora su opinión.
El lunes Bush se entrevista con el primer ministro egipcio, Hosni Mubarak.