El sector azulejero renuncia a los dividendos para reinvertir
Pocos dividendos y altos índices de inversión, con limitado recurso al endeudamiento son la base de la fortaleza del sector azulejero español, según un estudio presentado ayer en Castellón por KPMG. Según esta consultora, la rentabilidad del sector descendió en 1999 por el aumento de los precios del gas, pero su "excelente salud financiera" le otorga un importante potencial de crecimiento. Javier Alfonso Valencia
Sólo nueve de las 21 mayores empresas azulejeras españolas (el 42,9%) repartió dividendos en 1999, pese a que sumaron unos beneficios netos de 16.299 millones de pesetas (97,96 millones de euros). El 82,3% de esta cantidad pasó a engrosar sus fondos propios, lo que en este sector equivale a decir que se reinvirtieron.
Es uno de los datos que destaca KPMG en el estudio La industria del azulejo en Castellón -que abarca hasta 1999-, presentado ayer por la consultora. El trabajo recoge un análisis de las 21 mayores compañías azulejeras, cuyas ventas representan el 40,1% de la facturación de esta industria.
Según KPMG, los datos recogidos en los últimos años muestran "un grupo de sociedades fuertes financieramente, con grandes inversiones tanto en inmovilizados productivos como en participaciones financieras en nuevas sociedades, inversiones que se han mantenido en los últimos ejercicios, todo ello acompañado de rentabilidades económicas superiores a la media de otros sectores".
La consultora cifra en unos 28.000 millones de pesetas (168 millones de euros) la inversión realizada en 1999 por las empresas del estudio -88.578 millones en los últimos cuatro años- y detecta un incremento del recurso al endeudamiento bancario, especialmente a largo plazo. No obstante, los fondos propios representaban todavía un 45,8% del pasivo, frente al 29,6% de la deuda bancaria y el 24,6% de otras deudas.
Los datos de 1999 reflejan el impacto que tuvo la fuerte subida de los precios del gas en la industria azulejera, que provocó en el grupo de mayores empresas una caída del beneficio bruto agregado del 2,6%, aunque el efecto del impuesto de sociedades consiguió que el beneficio neto de las 21 compañías aumentase un 12,1%.
El trabajo realizado por KPMG concluye que "el análisis de las cifras financieras del sector demuestra que éste posee un importante potencial de crecimiento a medio plazo".
Entre las empresas analizadas, Cerámica Peñarroya destaca como la de mayor rentabilidad económica -relación entre resultado de explotación y activo-, con el 19%, seguida de Grespania, con el 18,5%. Sin embargo, KPMG sitúa por delante de ellas en rentabilidad final, sumando todos los ratios, a Venís -segunda empresa del grupo Porcelanosa- y a Halcón Cerámicas.
Empresas que invierten en empresas
Uno de los cambios más significativos de los últimos años entre los azulejeros es, según KPMG, el aumento constante de la inversión en otras sociedades por parte de las compañías consolidadas. Grupos como Porcelanosa, Gres de Nules o Taugrés destinan parte de su inversión a la compra de participaciones en otras empresas azulejeras, especialmente nuevos proyectos.
Según el estudio presentado ayer, en 1995 dichas inversiones ascendían a 8.938 millones de pesetas (53,72 millones de euros), mientras que en 1999 alcanzaron 31.623 millones (190 millones de euros), lo que supone un incremento medio anual del 37,15%.
Según fuentes del sector, las participaciones cruzadas entre sociedades y empresarios particulares castellonenses están muy extendidas y es casi imposible conocerlas, dado el hermetismo que, como destaca KPMG, mantienen las empresas respecto a este tipo de inversiones.
Por ello, el estudio sitúa a Pamesa como la empresa con más ventas -18.291 millones-, por delante de Porcelanosa -17.913-, aunque es sabido que el grupo de empresas de los socios de Porcelanosa factura cerca de 100.000 millones de pesetas (601 millones de euros).