La auditoría rebaja un 40% el beneficio de 2000 declarado por Recoletos
Los auditores consideran que Recoletos se apuntó indebidamente 2.333 millones de pesetas de ingresos extraordinarios en sus resultados de cierre de 2000, una cifra que representa un 40% de los 5.833,5 millones de pesetas de beneficio neto declarados por la empresa de comunicación.
Recoletos ha tratado de contrarrestar con dos apuntes extraordinarios tanto los gastos de su salida a Bolsa como el impacto negativo indirecto sobre sus cuentas de la desfavorable evolución de la cotización. Las acciones han caído un 35% desde los 12 euros que sirvieron de precio para la colocación en Bolsa.
Así, según la auditoría realizada por PricewaterhouseCoopers, "con el objetivo de compensar los gastos de ampliación de capital y de salida a Bolsa, [Recoletos] ha procedido a registrar un ingreso extraordinario por 1.781 millones de pesetas con cargo a la prima de emisión generada en la mencionada operación". Además, "con el objetivo de compensar el efecto de la evolución desfavorable de su valor bursátil sobre las opciones sobre acciones instrumentadas para hacer frente al plan de opciones sobre acciones para directivos, [Recoletos] ha procedido a registrar un ingreso extraordinario por 552 millones de pesetas con cargo a la misma prima de emisión, (...) por considerar que la contratación de estos instrumentos financieros ha estado directamente relacionada con la operación de ampliación de capital y salida a Bolsa".
Con respecto al primer apunte de 1.781 millones, los auditores admiten que su efecto final asemeja el tratamiento contable al admitido en países como el Reino Unido y Estados Unidos, donde se permite cargar los gastos de salida a Bolsa directamente contra el patrimonio de la empresa. Sin embargo, ni ese primer apunte ni el segundo son acordes con los principios contables españoles, que no permiten llevar a la cuenta de resultados como ingresos extraordinarios esos 2.333 millones.
La empresa de comunicación publicó un resultado neto de 5.833,5 millones que suponía un aumento del 60% sobre 1999. De restarse del beneficio neto los 2.333 millones señalados por los auditores, el resultado quedaría en 3.500 millones, un 3,7% menos que el logrado el año anterior.
Recoletos también señala en la auditoría que destinará 1.750 millones de pesetas de su beneficio de 2000 a repartir dividendos (0,08 euros por acción), de los que cerca de 1.400 millones le corresponden a Pearson, su matriz británica.