Greenspan advierte que el aterrizaje de EE UU aún no ha finalizado
El presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, advirtió ayer que la fase de desaceleración económica "todavía no ha llegado a su fin" y que las bajadas de tipos de enero no han sido suficientes. El Gobierno estadounidense rebajó ayer mismo el dato de crecimiento del cuarto trimestre de 2000, colocándolo en el 1,1%, el nivel más bajo desde 1995.
Alan Greenspan presentó ayer a la Cámara de Representantes un panorama más sombrío que el que ofreció al Senado hace sólo dos semanas. El banquero reconoció que la economía estadounidense ha empezado a repuntar algo en los dos primeros meses del año, pero advirtió que "todavía parece estar muy por debajo de su potencial" de crecimiento y que la fase de desaceleración "todavía no ha llegado a su fin".
Las compañías están reajustando "los excesos de inventario acumulados en 1999 y 2000". Es decir, recortando producción de forma acelerada para afrontar la desaceleración de la demanda. Y el proceso todavía no ha terminado. Además destacó el fuerte declive registrado en la confianza de los consumidores (en febrero cayó por quinto mes consecutivo, colocándose al nivel más bajo desde 1996) y dijo que este indicador "deberá ser vigilado de cerca".
La Reserva Federal recortó en enero los tipos de interés interbancarios en un punto porcentual en el plazo de un solo mes (algo que no ocurría desde la recesión de 1990-1991), pero Greenspan re-conoció que ello no ha sido suficiente para reavivar el ritmo de crecimiento.
"Incluso tras las actuaciones de enero", dijo, la balanza de riesgos "sigue inclinándose hacia" una tendencia "inconsistente con un comportamiento económico satisfactorio".
Sus palabras fueron interpretadas por analistas e inversores como la confirmación de que el banco central estadounidense volverá a abaratar el precio del dinero. Sin embargo, Alan Greens-pan también anotó que, siempre que sea posible, prefieren actuar en las reuniones oficiales. Es decir, que puede que esperen a la reunión del consejo de gobernadores, que está prevista para el próximo 20 de marzo, para volver a bajar los tipos de interés.
El discurso de Alan Greenspan coincidió con el anuncio de que el crecimiento del PIB en el cuarto trimestre del año pasado fue inferior a lo que se pensaba. Según informó el Departamento de Comercio de EE UU, la economía estadounidense creció sólo un 1,1% en ese periodo, frente al 1,4% anunciado previamente y el 2,2% del tercer trimestre del año.
Se trata del ritmo de crecimiento más bajo desde el segundo trimestre de 1995, y los causantes de la revisión fueron la menor acumulación de inventarios, los datos de comercio exterior y un aumento más moderado del consumo de particulares (2,8%, frente al 2,9% previsto inicialmente y el 4,5% del tercer trimestre).