Autonomía tecnológica y producción competitiva
El sector de la aeronáutica es referente mundial en defensa, seguridad e industria aeroespacial
Las industrias de defensa, seguridad, aeronáutica y espacio, que representa Tedae, la asociación española de empresas tecnológicas del ramo, son un sector estratégico y de vanguardia con especial protagonismo estos últimos años, y más tras el estallido de la guerra de Ucrania
Tiempos convulsos con las consecuencias, primero, de la pandemia, del cierre de fábricas y del espacio aéreo y de la ruptura de las cadenas de suministro, y después, la invasión rusa, que “ha puesto de manifiesto la importancia de nuestras industrias y ha dejado claro que ni podemos ni debemos depender de terceros para nuestra seguridad y libertades”, afirma Ricardo Martí Fluxá, presidente de Tedae. Un sector muy dinámico, innovador y, sobre todo, resiliente, lo que le ha permitido desarrollar constantemente productos muy competitivos, lograr una gran autonomía tecnológica y convertirse en un referente internacional, resume el directivo.
“Las perspectivas son alentadoras. A pesar del impacto de las cadenas de suministro en los sectores de defensa, seguridad, aeronáutica y espacio, y del aumento de los costes, la recuperación de los vuelos comerciales tras la pandemia y el aumento del presupuesto de defensa en Europa permiten una perspectiva optimista”, asegura Begoña Cristeto, responsable de automoción e industria de KPMG en España.
Una industria que ya ha iniciado la senda de la recuperación con una facturación de 11.594 millones de euros en 2021, lo que supuso un incremento del 2% frente al año anterior, aunque aún lejos de los niveles prepandémicos de 2019, con 14.101 millones. El dato supone el 1,4% del PIB español.
La fuerte inversión en I+D+i garantiza el desarrollo de una tecnología puntera y dual
Lo que sí está ya por encima de niveles precrisis (5%) es el empleo, con más de 202.500 trabajadores, y el esfuerzo por mantener la inversión en I+D+i, superior a 2.100 millones, “el 13% del total nacional”, apunta Cristeto, y “nos garantiza desarrollar esa tecnología puntera y dual, generar trabajo de calidad y tener esa visibilidad en Europa”, añade Martí Fluxá.
Defensa, en estos años de crisis, ha tenido una capacidad tractora sobre otros sectores. “Progresivamente ha ido diversificando sus fuentes de ingresos y en la actualidad una parte importante de estos procede de la rama civil”, revela Cristeto.
Logros y retos en tiempos inciertos
Agencia Espacial Española. La actividad espacial está más que consolidada y 2022 fue clave, con la creación y puesta en marcha de este organismo, que implementará una verdadera política nacional espacial, señala Tedae.
Digitalización y sostenibilidad. En un entorno cada vez más exigente e imprevisible, es necesario acelerar la transformación digital y seguir invirtiendo en I+D+i para lograr los objetivos de sostenibilidad.
Vulnerabilidad. Las empresas son conscientes de la fragilidad de sus cadenas de suministro y estudian medidas de protección, como la relocalización o la compra de sus proveedores o alianzas con ellos.
