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Cómo recuperar el control de tu privacidad en el iPhone y dejar de ser rastreado

Las opciones que mostramos son sencillas de implementar y posibilitan cortar los hilos con el seguimiento que pueden hacer los servicios que se utilizan en los teléfonos de Apple.

Chica utilizando un iPhone de Apple
Iván Martín Barbero

A medida que los iPhone se han convertido en una herramienta indispensable del día a día, también han evolucionado para recopilar una cantidad significativa de datos del usuario. Aunque Apple ha implementado políticas de privacidad y herramientas de protección orientadas al usuario, muchas de estas funciones vienen habilitadas por defecto o quedan ocultas en rincones poco accesibles del sistema. Te vamos a mostrar cómo darle uso.

El verdadero problema es que la configuración del iPhone, tal y como viene de fábrica, prioriza la comodidad y la personalización de los servicios por encima de la privacidad. Sin embargo, es posible modificar esta tendencia y ajustar el iPhone para que sea el usuario quien tenga el control y no al revés. El objetivo final es el siguiente: que tu teléfono de Apple sirva las necesidades que tienes, y no a los intereses de otros.

Desactivar el rastreo entre aplicaciones

Desde la llegada de iOS 14.5, Apple introdujo una de sus funciones más conocidas en términos de privacidad: App Tracking Transparency(ATT). Esta herramienta impide que las aplicaciones rastreen al usuario a través de diferentes apps y sitios web con fines publicitarios, salvo que se otorgue permiso explícito.

Uso de un iPhone con iOS 26

Para gestionar esta opción, basta con ir a Ajustes > Privacidad y seguridad > Rastreo y desactivar la opción Permitir que las apps soliciten rastrearte. Así se bloqueará automáticamente cualquier intento de seguimiento sin mostrar notificaciones solicitando permiso. También es posible gestionar los permisos individualmente desde esa misma sección, permitiendo el rastreo solo en aquellas aplicaciones que se consideren seguras o necesarias.

Bloquear la publicidad personalizada y la recogida de analíticas

Apple no comparte datos personales con terceros para fines publicitarios. No obstante, sí recopila información del uso de sus propias apps para ofrecer anuncios personalizados dentro del ecosistema de iOS. Para limitar esto, haz lo siguiente:

iPhone 16 de color azul en una mesa

Este pequeño cambio puede marcar una gran diferencia a la hora de reducir la cantidad de datos que llegan a los servidores de Apple.

Eliminar metadatos de localización en fotos y vídeos

Cuando se toma una fotografía con la función de ubicación activada, el iPhone guarda metadatos que incluyen coordenadas GPS, nombres de lugares y detalles del entorno. Esto, que puede ser útil para organizar álbumes o crear recuerdos automáticos, también representa un riesgo de privacidad al compartir imágenes. Esto debes hacer para eliminar esta información antes de enviar una foto:

Este ajuste evita que se almacenen datos sensibles con cada nueva captura.

Controlar los servicios de localización por aplicación

Muchos servicios y apps solicitan acceso a la ubicación, aunque su uso no lo justifique. Limitar este acceso mejora la seguridad y también tiene un impacto positivo sobre la batería del dispositivo. Para modificar esta configuración, sigue las indicaciones:

Trasera de un iPhone

Además, algunas aplicaciones ofrecen la opción de utilizar una ubicación aproximada en lugar de precisa. Esta alternativa también puede activarse desde el mismo menú, pulsando sobre cada app.

Limita la Actualización en segundo plano

Esto permite que las aplicaciones se actualicen mientras no están abiertas. Aunque útil para acceder a contenido actualizado, también consume batería, datos móviles y puede ser un canal para enviar la actividad del usuario a servidores externos. Para restringir este comportamiento haz lo que te propornemos:

Pantalla de un iPhone de Apple

Aunque el iPhone está diseñado para ofrecer una experiencia personalizada, muchos de sus servicios están configurados de forma predeterminada para recopilar información del usuario. Revisar y modificar la configuración de privacidad permite recuperar el control sobre los datos personales y limitar los accesos innecesarios. Si se aplican las medidas descritas, el teléfono de Apple puede transformarse en una herramienta centrada en el usuario, donde la privacidad vuelve a ocupar el lugar que nunca debió perder.

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