¡Sorpresa! El CMF Phone 1 de Nothing es más complicado de reparar de lo esperado
Un vídeo muestra lo complejo que es la gestión de su interior
El CMF Phone 1 ha conquistado a muchos desde su llegada por su innovador diseño modular. Pero, ¿esto se traduce realmente en una mayor facilidad de reparación? Pues un vídeo parece dejar claro que en lo que tiene que ver con la reparación, este modelo no es precisamente el más destacado de todos los que hay en el mercado.
A diferencia de la mayoría de los teléfonos del mercado, la parte trasera del CMF Phone 1 se sujeta con solo cuatro tornillos de cabeza plana y un perno más grande, denominado Punto de Accesorio por Nothing. Tras retirar estos tornillos, una herramienta de palanca permite quitar la cubierta trasera de plástico, revelando los componentes internos del dispositivo. Hasta aquí, todo bastante normal e, incluso, muy bien gracias al uso de tornillería.
Sin embargo, acceder a la batería no es tan sencillo. Una fina capa de plástico la protege, y aunque se puede retirar con facilidad, esta acción anula la garantía, por lo que solo se recomienda en caso de extrema necesidad. Este detalle es muy relevante, ya que impacta en todo el proceso de desmontaje.
Más complicaciones en el CMF Phone 1
El desmontaje continúa con la retirada de 12 tornillos Phillips, cada uno con adhesivos de manipulación que indican si se ha abierto el dispositivo, invalidando nuevamente la garantía. La mitad superior de la cubierta de plástico trasera alberga las cubiertas de las lentes de la cámara y las antenas.
El siguiente paso es la placa base, donde se encuentran las cámaras frontal y trasera, el procesador, la RAM, el almacenamiento y los sensores. Incluso en esta etapa, la batería sigue siendo difícil de extraer debido a la existencia de un tornillo oculto debajo del Punto de Accesorio que, si bien aporta estabilidad, hace que el proceso de retirada del componente sea más complejo de lo esperado. Solo tras retirar este tornillo oculto, la batería se puede extraer utilizando las lengüetas de extracción.
Una reparación que sorprende por ser compleja
A pesar de su diseño modular, el CMF Phone 1 obtiene una puntuación de 6,5 sobre 10 en el apartado de la reparación para PBKreviews -que es el responsable de la grabación del vídeo-. El motivo para el resultado indicado es la dificultad para extraer la batería y las cubiertas de plástico sobre la placa base y el conjunto de altavoces.
Es importante observar que la sencillez inicial, representada por los tornillos de cabeza plana y el Punto de Accesorio, da paso a desafíos más complejos a medida que avanza el desmontaje. La protección adicional de la batería, aunque comprensible desde el punto de vista de la seguridad, añade una capa de complejidad que podría disuadir a usuarios menos experimentados en la reparación de dispositivos.
Además, los adhesivos de manipulación en los tornillos Phillips sugieren un enfoque ambivalente por parte de los diseñadores: ofrecer cierta accesibilidad para reparaciones, a la vez que mantienen mecanismos que disuaden la intervención no autorizada. Esto plantea una cuestión interesante sobre el equilibrio entre la accesibilidad del usuario y la protección del dispositivo.
El CMF Phone 1 bien es cierto que representa un paso adelante en el diseño de teléfonos, especialmente para aquellos interesados en la modularidad y el potencial de reparación. Sin embargo, como lo demuestra el vídeo que hemos dejado en este artículo, la transición de la teoría a la práctica presenta retos que deben ser considerados tanto por los consumidores como por los fabricantes en futuros desarrollos… porque este terminal parece que, simplemente, es el inicio de este gama de producto.
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