China planea limitar la potencia de los cargadores inalámbricos. ¿Por qué motivo?
Afectará a Xiaomi y otras marcas.
A finales del pasado mes de mayo Xiaomi nos sorprendió con su tecnología de carga rápida Hypercharge. Un sistema capaz de ofrecer una potencia de 200W en carga por cable, alcanzando los 120W en carga inalámbrica. Pero parece que el gobierno de China va a cortarle las alas al fabricante con sede en Pekín.
Xiaomi sabe que la carga rápida es un elemento cada vez más importante en un mundo en el que nuestros teléfonos móviles se han convertido en ordenadores de bolsillo. Y la idea de cargar un teléfono con una batería de 4.000 mAh en tan solo 8 minutos, o 15 minutos si se usa la carga inalámbrica, suena muy apetecible. O mejor dicho, sonaba.
Más que nada porque el gobierno de China quiere regular los sistemas de carga inalámbrica para que tengan una limitación de 50W. Sin duda, una terrible noticia para Xiaomi y otros fabricantes chinos que están trabajando muy duro para ofrecer la carga rápida más completa.
La carga inalámbrica puede afectar a otros dispositivos electrónicos
Según indica la fuente de esta información, la web del Ministerio de Industria y Tecnología de la Información publicó un informe en el que indicaba las "Disposiciones provisionales sobre la gestión de radio de equipos de carga inalámbrica”.Y dentro de las medidas que quieren tomar, cualquier equipo de carga inalámbrica importado o vendido en china deberá tener un límite de potencia de 50W.
El motivo de esta decisión no tiene nada que ver con los peligros de usar una carga rápida tan potente. Xiaomi ya dejó muy claro que su tecnología Hypercharge no perjudicaría a la batería de los terminales que carga. El problema es que la frecuencia en la que trabaja la carga inalámbrica puede provocar interferencias peligrosas con diferentes servicios de radio.
Hay que tener en cuenta que una potencia de carga inalámbrica demasiado alta puede causar riesgos de seguridad para el sector de la aviación, el transporte marítimo, la observación astronómica… Vamos, que no es un tema baladí precisamente.
De momento estamos ante un borrador que debe pasar por un proceso antes de aceptarse finalmente, por lo que se esperan modificaciones a lo largo del año antes de que presenten la normativa definitiva, que se espera para final de año.
Pero está claro que, o cambia mucho la nueva normativa china sobre la carga rápida de dispositivos, o el varapalo para los grandes fabricantes asiáticos será muy grande. ¿Le vale la pena a Xiaomi lanzar su tecnología Hypercharge fuera de las fronteras chinas, ya que en su país será ilegal dentro de muy poco?