Android Auto y Carplay, tan peligrosos al volante como atender al móvil
Así lo refleja un estudio recientemente publicado.
Todos los que conducimos y llevamos un móvil en el coche tenemos claro que no podemos tocarlo mientras circulamos por calles y autovías porque, en primer lugar, se trata de un acto irresponsable que pone en peligro nuestra seguridad y la de los demás y, además, porque puede acarrearnos una sanción por parte de la Guardia Civil o las policías locales. Ahora bien, ¿qué ocurre cuando los conectamos por bluetooth al coche para usarlo a través de las pantallas táctiles que vienen con Carplay y Android Auto?
Hasta ahora todos teníamos claro que si estos sistemas operativos de Apple y Google estaban instalados en nuestros coches era porque se trataba de métodos alternativos para hacer lo mismo, pero con total seguridad. ¿Es así? Ahora, un estudio desvela que, al contrario de lo que todos pensábamos, estos sistemas operativos para vehículos podrían ser tan inseguros como conducir bajo los efectos del "cannabis y el alcohol".
¿Sistemas inseguros o conductores imprudentes?
El estudio realizado por la IAM RoadSmart británica viene a concluir que el uso de las pantallas táctiles con Carplay y Android Auto afectan negativamente a la atención que ponemos en la conducción, cuando se trata de llevar a cabo tareas similares a las que realizaríamos en la pantalla de un móvil. Como ejemplo lo comparan con escribir un mensaje con nuestro teléfono, algo que creen "es menos peligroso" que atender a estas nuevas pantallas inteligentes.
Los responsables de la organización de conductores más grande de Reino Unido llevó a cabo pruebas con distintos tipos de conductores. En cada una, los voluntarios debían replicar situaciones habituales de nuestro día a día, como conducir siguiendo a otro vehículo, completar vueltas en un circuito con forma de "8" o seguir un tráfico "errático". Además, durante esos trayectos se les pidió tareas como poner música, sintonizar la radio, comenzar rutas de navegación, enviar mensajes de texto y realizar llamadas de teléfono utilizando exclusivamente órdenes de voz. Por último, les pidieron realizar los mismos recorridos pero utilizando la pantalla táctil.
Los resultados fueron bastante reveladores ya que los conductores que manejaron Carplay y Android Auto con las pantallas táctiles presentaron tiempos medios de respuesta ante los imprevistos entre un 53 y un 57% peores que los de una persona atenta y concentrada que no se distrae. Pero aquí viene el dato demoledor: ¿sabéis qué porcentajes de respuesta tienen las personas que conducen con un límite de alcohol en sangre del 0,08%, o que hayan fumado "cannabis"? Solo de un 12 y un 21%, respectivamente.
Tampoco penséis que la atención mejoró con las órdenes de voz a Siri o el asistente de Google. Los conductores alcanzaron entre un 30 y un 36% de respuestas peores, lo que tampoco mejoraba demasiado las cosas. Es más, mientras los voluntarios manejaban las pantallas táctiles o daban órdenes, la circulación se volvía, según el informe, "errática", con invasiones leves de los carriles contrarios o recortes alarmantes en las distancias de seguridad con los vehículos que les precedían. ¿Estáis de acuerdo?