Un Tesla Model S de la policía se queda sin batería en plena persecución
Ocurrió en la localidad de Fremont, al lado de Palo Alto.
Es noticia porque se trata de un coche eléctrico y, como muchos piensan que la autonomía de estos vehículos es un lastre a la hora de comprarlos, pues se usa como arma arrojadiza. Pero si fuera un coche de gasolina, estaríamos en las misma: en medio de una persecución no hay tiempo para detenerse en una gasolinera y echar unos litros.
Sea como fuere, ha ocurrido en la localidad de Fremont, una ciudad situada entre San Francisco y Palo Alto que hace apenas unos meses, en enero, anunciaba al mundo que su departamento de policía compraba varias unidades del Tesla Model S. Toda una declaración de intenciones que ahora se ha visto sorprendida por esta noticia.
Persecución a toda velocidad
Ocurrió el pasado viernes 20 de septiembre cuando un policía inició una persecución a un "vehículo criminal" que llegó a alcanzar velocidades de más de 190km/h. En un momento de la emergencia, se escuchó por la radio el mensaje de uno de los oficiales que avisaba de la fatalidad: "Tengo menos de seis millas (10 kilómetros) de batería en el Tesla, así que podría perderlo en un segundo".
La persecución tuvo que abortarse y perdieron al sospechoso, lo que llevó a todas las unidades a volver a la base. Eso sí, uno de ellos avisó de que tardaría en llegar un rato: "Tengo que tratar de encontrar una estación de carga para el Tesla para poder regresar a la ciudad".