Los operadores ya pueden intervenir el tráfico de Red por seguridad o crisis comunitaria
Desde hoy, y con la intención de preservar la seguridad y la integridad en la Red, los operadores de telecomunicaciones proveedores de servicios de Internet podrán intervenir los datos de Internet de los usuarios. Una medida que está planteada para evitar los ataques de denegación de servicios, la difusión de malware, y como medidas excepcionales en caso de crisis de seguridad nacional o comunitaria. No obstante, se han marcado pautas para evitar que se lleven a cabo intervenciones que vayan en contra de la neutralidad de la Red.
Los Proveedores de Servicios de Internet ya tienen permiso para intervenir los datos de Internet en caso de emergencia
La nueva normativa permitirá afrontar de forma temporal, y como excepción, con el aval judicial o policial dentro del país afectado, compromisos en la Red en contra de la seguridad nacional o comunitaria. Estas acciones se contemplan en caso de perjuicios graves en contra del tráfico de datos de los operadores, de forma puntual. Se podrán mitigar efectos de congestión con derivaciones equilibradas, y nunca si la Red del operador está congestionada por la falta de inversión o escasez de capacidad.
Para mantener la neutralidad de la Red se han contemplado puntualizaciones como 'salvarguardar el tratamiento equitativo y no discriminatorio del tráfico en la prestación de servicios de acceso a Internet'. De esta manera, como en los Estados Unidos, no se permitirá el uso prioritario de la Red a ninguna empresa o particular que haya pagado para ello. Se prohíbe así la discriminación, bloqueo, estrangulamiento o degradación del tráfico por parte de los Proveedores de Servicios de Internet, y se establecerán sanciones en caso de incumplimiento de la normativa.
Por lo tanto, a priori, sólo se aplicarán medidas excepcionales sobre el tráfico de Internet cuando se declare un estado de emergencia. Bien sea para la seguridad de los servicios prestados por el operador de telecomunicaciones, o bien a escala nacional y/o comunitaria. Todo ello sin discriminaciones puntuales sobre empresas, organismos o particulares, tanto a favor como en contra. Y esta posibilidad se ha abierto a los Proveedores de Servicios de Internet desde hoy, día 30 de agosto de 2016, en toda Europa.