Cómo capturar el texto que no se puede copiar con Ctrl+C
Es quizás algo ya tan intrínsecamente unido a la informática que muchos lo usamos por defecto. El atajo de teclado que nos permite al pulsar la tecla CTRL más la de la letra C y que copia como por arte de magia cualquier texto para luego incrustarlo en otro documento con un CTRL + V. Sin embargo, no son pocas las veces que nos vemos intentando una y otra vez copiar un texto que se resiste a ser capturado por este método.
Algunos son los que nos aparecen en los diálogos de Windows dentro de las ventanas de los programas o algún error que nos ha aparecido y que no podemos capturar para mandárselo al responsable de IT (o al "amigo informático"). Para estas situaciones se ha desarrollado Textify, un programa que tiene, además, la cualidad de que no necesita ser instalado. Es decir, es uno de los llamados "Portables", que va incluido en un sólo archivo ejecutable que podemos tener en un pendrive o en un rincón del sistema operativo.
Pesa apenas 80 Kb, por lo que no presentará ningún problema para descargarlo tanto mediante Wifi o si estamos conectados a una red móvil. Al activarlo, la interfaz es muy sencilla y lo primero que nos dirá es cómo queremos activarlo si con el botón CRTL, el ALT o el de mayúsculas, además de uno de los botones del ratón. Una vez que hagamos la combinación adecuada podremos marcar cualquier texto que tengamos en pantalla y en lugar de buscar las letras o caracteres, se vale de un sistema de reconocimiento de texto OCR. Es decir, hace como un escáner cuando transforma un documento reconiciendo el texto que hay en el. Textify hace el mismo proceso, pero con las imágenes que tenemos en pantalla.
Una vez que reconoce el texto, nos lo indica en un campo que ya es editable, desde ahí ya podemos marcarlo y utilizar la combinación de siempre, el CTRL+C para llevárnoslo a cualquier documento que necesitemos.
Textify, ya para terminar, no es infalible como nos comentan desde Ghacks, sobre todo cuando los textos son realmente pequeños, pero dado que pesa tan poco y se presenta tan práctico, no está de más tenerlo activado en un rinconcito del escritorio para echar mano de él cuando nos haga falta.