Así ganará dinero Microsoft a pesar de que Windows 10 será gratis
El pasado 21 de enero, durante el evento de presentación de la nueva versión del sistema operativo de Microsoft, Windows 10, Joe Belfiore anunció que Windows 10 sería totalmente gratis para aquellos usuarios que tuviesen actualmente Windows 7 o Windows 8.1 en sus equipos, pero sólo si la actualización se realiza durante el primer año a partir de su lanzamiento.
Esto significa que los usuarios que quieran conseguirlo después del primer año, es posible o casi seguro, que tendrán que pagar un precio que aún no se ha revelado por parte de Microsoft. Básicamente todo esto apunta a que el objetivo principal de Microsoft con esta campaña en la que aparentemente ofrecían un sistema operativo gratuito con el fin de recuperar clientes no era más que una necesidad.
Sólo gratuito para los actuales consumidores de Windows 7 y 8.1
Cuando todo parecía que la promoción de conseguir Windows 10 de forma gratuita era como un regalo caído del cielo, ya que los clientes podrían actualizar sus equipos a la última versión del sistema operativo sin tener que pagar ni un euro, parece que cuando se mira de cerca la campaña, se ve claro las intenciones de Microsoft.
Estas no serían otras que una estrategia muy inteligente y eficaz en la que ofrecería esta promoción para los actuales consumidores que son los que aportan el menor porcentaje de ingresos en la compañía y los que además servirán de tester del sistema.
De esta manera, las organizaciones y empresas, que son la principal fuente de ganancias para el gigante de software con sede en Redmond, ya que suelen ser las que mayor número de licencias suelen comprar, son las que deberán pasar por caja para obtener el nuevo Windows 10.
Si se ofrece Windows 10 gratis equivale a más PCs vendidos
Otra de las mayores industrias que supone una gran fuente de ingresos a Microsoft son los OEMs o distribuidores. De esta manera estos distribuidores representan el 19% del negocio de Microsoft y por supuesto que Windows 10 estará disponible con una tarifa también para ellos.
De ahí que los distribuidores o fabricantes de equipos sean para Microsoft tan importantes como las propias organizaciones y empresas ya que todos ellos deberán pagar derechos de licencia para instalar Windows 10 en sus dispositivos.
Esto podría hacer que se incrementase el precio final de los dispositivos, por lo que Microsoft podría contrarrestar haciendo que el sistema operativo vaya instalado de forma gratuita, algo que ya hizo para pequeñas tablets y smartphones, y de esta manera la compañía podría ayudar a vender mas PCs y dispositivos impulsados por su sistema operativo.