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Las claves: el coste de la vida y los salarios, y las nuevas cartas de Ryanair

Las clases más bajas ven como vivienda y alimentos suben, pero sus sueldos no lo hacen a la altura. La aerolínea comienza a desgranar su programación

La crisis inflacionaria que siguió a la invasión de Ucrania comenzó por la energía, pero se extendió con rapidez a otros productos, como los alimentos. Pasados más de tres años desde entonces, y no sin sufrimiento, las subidas de precios –esto es, la inflación– parecen haberse moderado, pero sus cicatrices siguen visibles. Según el Banco Central Europeo, los alimentos se han encarecido un 34% en España desde 2019 –buena parte de ese incremento se dio entre 2021 y 2023–, una subida que no se puede entender sin mirar los precios de la energía o de los fertilizantes, además de otras cuestiones como las sequías que dispararon el aceite de oliva.

Todo esto tiene un especial impacto en las clases más bajas, que sufren para llegar a fin de mes, mientras ven cómo vivienda y alimentos suben, pero sus sueldos no lo hacen a la altura. El salario bruto medio anual ha aumentado cerca de la mitad que la inflación de los alimentos en este mismo periodo. Quizá este sea el mejor argumento a favor de una nueva revalorización del SMI, toda vez que, por desgracia, este acapara la banda salarial más habitual entre los trabajadores en España.

Cerco a Israel en la FIFA, la UEFA y Eurovisión. En el PP, según quién hable

El castigo a Israel por la brutal devastación de Gaza se abre paso. En el mundo del fútbol, la FIFA y la UEFA debaten ya la exclusión del país de las competiciones de fútbol, pese a la presión de Trump para que no lo haga. Eurovisión ha adelantado a noviembre la votación sobre su expulsión. Y sigue dando que hablar el contundente discurso de Felipe VI en la ONU, en el que habló de “aberrante masacre”.

En España es conocida la posición del Gobierno y sus aliados a favor del boicot. ¿Y en la oposición? Pues según quién hable. Juan Manuel Moreno y Alfonso Rueda hablan ya abiertamente de “genocidio” mientras Isabel Díaz Ayuso agasajaba a la encargada de negocios de Israel. Esa disonancia incomoda mucho a Feijóo. Algunos observan que Gaza empieza a rimar con Irak.

Ryanair empieza a mostrar sus cartas en España

Ryanair ha dejado que causara todo su efecto el bombazo del recorte de un millón de plazas en aeropuertos regionales, para desvelar a partir de ahora su oferta al completo para este invierno. Con el tijeretazo, la irlandesa ha dejado clara su aversión a las tarifas de Aena, pero no ha puesto cifras aún a su despliegue en destinos turísticos y en los dos grandes hubs, Barajas y El Prat. El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha defendido al gestor aeroportuario y apuesta a que el saldo final para la low cost será de crecimiento. No tiene pinta de que vaya a perder. La compañía comenzará a desgranar el jueves su programación. Empezará en Málaga y se espera un mensaje amable. El alcalde, el popular Francisco de la Torre, no se ha reservado un asiento en primera fila para llevarse un revés.

La frase

Tras el sorprendente optimismo del presidente Trump sobre Ucrania se esconde el anuncio de una menor implicación de EE UU y el traspaso a Europa de la responsabilidad de poner fin a la guerra. Mejor la verdad que las ilusiones
Donald Tusk, primer ministro de Polonia

Italia se relaja en su carrera por la confianza del mercado

En un contexto de retraso paulatino de la edad de jubilación, Italia estudia hacer casi lo contrario: congelarla. La ley actual vincula la jubilación con la esperanza de vida, de modo que cada dos años se revisa la edad límite para trabajar. Pero el Gobierno de Giorgia Meloni, que está consiguiendo casi la cuadratura del círculo, al combinar estabilidad política con ortodoxia presupuestaria, es consciente de que sus posibilidades electorales en 2027 dependerán en gran medida del sector más veterano de la población. Italia ha ganado últimamente mucho atractivo entre los compradores de bonos respecto a Francia, y quizá eso esté haciendo que las autoridades empiecen a relajarse. La demografía, una vez más, exhibe su trascendente influencia en las decisiones económicas.

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