Las claves: Las cuentas de Vox, expulsar a más extranjeros de los que hay en España
La cifra de deportables del partido político fue dicha a bulto, sin rigor ninguno


Vox sigue jugando a la carta xenófoba, con más motivo ahora que estas posiciones se imponen también en EE UU de la mano de Trump, quien presume de rodear a detenidos de cocodrilos. Rocío de Meer, una de las portavoces de Vox, habló ayer abiertamente de la intención de su partido de expulsar de España a siete u ocho millones de personas de origen extranjero, una cifra que excede al total de foráneos residentes en España (6,9 millones según el INE), y debe incluir no solo a personas con permiso de residencia perfectamente obtenido, a inmigrantes “de segunda generación” (es decir, nacidos en España, buena parte de ellos con nacionalidad española) y al millón y medio largo de ciudadanos de la UE residentes en España, a los que los tratados reconocen el derecho a establecerse en este país o cualquier otro del espacio europeo.
Es inútil jugar a adivinar los cálculos: la cifra de deportables de Vox fue dicha así a bulto, sin rigor ninguno, y la propuesta no tiene nada de viable. Afortunadamente, la economía no soportaría un declive poblacional y de mano de obra de esa magnitud. La democracia tampoco lo resistiría.
A la aceituna española solo le salvará su diversificación para evitar a Trump
Llueve sobre mojado en el agroalimentario español. Las dificultades para la aceituna de mesa empezaron en 2017, con la primera Administración Trump. Entonces, impuso un arancel del 35% a la aceituna negra. Después le llegó el turno a la aceituna verde, dentro de la disputa comercial entre EE UU y la UE por Boeing y Airbus, con un 25%, gravamen que quedó suspendido en 2021.
A todo ello se suma la amenaza actual del 20% de Trump en su segundo mandato. Agrosevilla, el principal exportador, dice que no puede renunciar a EE UU. No se trata de eso pero sí de diversificar lo que se pueda la producción. Es de primero de Económicas.
Putin tiene mecanismos más expeditivos contra los ministros que no le agradan
Anda la política española enfangada por las correrías de un exministro de Transportes, su asesor y su sucesor como número tres del PSOE. Lo que vamos conociendo llevará a que los tribunales hagan justicia, caiga quien caiga, como se ha hecho en casos similares antes.
En otros países de modos autoritarios, un ministro de Transportes caído en desgracia puede acabar mucho peor. Roman Starovoit, que ocupaba ese puesto en el Gobierno ruso, apareció ayer muerto tras haber sido destituido entre acusaciones de corrupción. La versión oficial apunta al suicidio, una práctica muy recurrente en la larga lista de depurados por Putin. El mismo lunes, otro alto cargo del Ministerio de Transportes, Andréi Korneichuk, murió de forma repentina. Como se muere allí.
La frase:
“La búsqueda de venganza de Donald Trump contra los BRICS [países emergentes] es decepcionante”
Cyril Ramaphosa, presidente de Sudáfrica
Churros, bares y negocios familiares de 150 años
Sorprende comprobar cómo en la era de las franquicias y grandes multinacionales hay negocios familiares que sobreviven viento en popa. Es el caso del negocio churrero en Pamplona perteneciente a la familia Elizalde-Fernández. Cumplirá el 13 diciembre su 153 aniversario. No hay recetas ni ingredientes secretos, tampoco estrategias comerciales: la masa, la temperatura del aceite “a ojo” y mucho trabajo. La Muñeta, como así se denomina la churrería, se apoya en los Sanfermines para salir adelante.
Así, con el fin de prosperar, hay miles de negocios familiares de hostelería repartidos por toda España, que necesitan del cuidado por parte de todas las Administraciones si no queremos que dentro de pocos años solo haya franquicias para tomar un café.