Las claves: los malabares numéricos del alquiler, y la primera crisis anual del mejor momento de la historial del tren español
El nuevo índice marca un tope del 2,2% para las subidas. Mientras los precios suben un 11,5% interanual
Las métricas económicas están íntimamente interconectadas, pero unas más que otras. Los alquileres, por ejemplo, suelen referenciar sus subidas a la inflación general (el IPC), pero como España atraviesa una crisis de la vivienda (por España hay que entender, fundamentalmente, las grandes ciudades), un nuevo índice limita las subidas al 2,2% a partir de este año. Pero solo para los contratos firmados a partir de mayo de 2023. Mientras, los alquileres, en general, han subido un 11,5% en tasa interanual. Unos malabares numéricos que no pueden competir con los que tienen que hacer los inquilinos para poder permitirse vivir en una vivienda decente (entendiendo decente por tener ventanas).
En otro orden de cosas, pero siempre dentro de la interconexión de las métricas, el ministro de Economía defiende que los salarios tienen que subir de acuerdo con la economía. No con el avance de la inflación, porque, defienden los economistas, eso crea un efecto espiral. Lo que no sube, sino que más bien baja, es la capacidad adquisitiva en España en los últimos años. Y, por tanto, la capacidad de pagar alquileres.
Solventada la primera crisis anual del mejor momento de la historia del tren
Apenas habían pasado unas horas de 2025 cuando la realidad golpeó al mejor momento de la historia del tren en España (Óscar Puente, ministro de Transportes, dixit). La caída, un muy inoportuno 1 de enero, del un sistema informático dejó plantados a cientos de viajeros de los trenes Talgo Avril, ese modelo que tantos dolores de cabeza ha dado en Transportes en el último año. Puente, tuitero reconocido y muy activo últimamente en la gestión de crisis en redes sociales, no se pronunció sobre el incidente, pero sí subió con ocasión de las campanadas un montaje de sí mismo hecho con IA delante de un tren. No parecía, eso sí, un Talgo Avril.
Todo lo que sube baja, pero algunas cosas más rápidas que otras
Una de las normas fundamentales de los mercados es que todo lo que sube acaba bajando en algún momento, con más o menos intensidad y durante más o menos tiempo. Y cada cosa lleva su propio ritmo y fuerza: cuando los bancos centrales comenzaron a subir los tipos de interés, las entidades financieras europeas remuneraron sus cuentas de forma más o menos simultánea, mientras que a las españolas se les reprochó haber tardado de más en apretar el botón.
Ahora que el precio del dinero baja, sin embargo, los bancos se han puesto las pilas para reducir su oferta de cuentas remuneradas. Otra que ha bajado con fuerza es la Bolsa en este inicio de año, después de haber hecho un notorio 2024. Es una norma sin fallo.
La frase
Una nueva iniciativa conjunta de libre comercio entre Europa y Estados Unidos podría evitar una peligrosa espiral arancelariaFriedrich Merz, líder de la CDU y favorito a la cancillería alemana
Sí se puede ser demasiado limpio (para su salud)
De todos los giros que nos esperaban con la entrada del nuevo año, quizá uno de los menos esperados es que ser (demasiado) limpio puede ser algo malo para la salud: nuevas investigaciones alertan de los riesgos de una higiene excesiva y buscan demostrar que la exposición a un microbioma equilibrado en los hogares educa a nuestras defensas para evitar alergias y enfermedades autoinmunes.
Esta noticia dará alas a los literalistas, que, cuando su pareja, compañero de piso o visita le recriminen la suciedad de su casa, recordarán con sorna que lo único que está haciendo es proteger su sistema inmunitario. Pero no deberían olvidar estos que de la literalidad hay que huir todo lo que se pueda. Y del exceso también. Incluso de limpieza.
