Los antimonopolio amenazan más a Microsoft que a Nvidia
La firma de chips no necesita comprar otras empresas de su ramo, como sí está haciendo la de software
Los gigantes que inviertan mucho en IA también tendrán que invertir en asesoramiento jurídico. Los reguladores prefieren actuar con rapidez para proteger la competencia. Pero la Comisión Federal de Comercio (FTC) de EE UU puede ser más importante para Microsoft que el Departamento de Justicia para Nvidia. Las agencias públicas se han dividido la responsabilidad de dirigir las investigaciones sobre ambas, según el NYT. Un acuerdo similar en 2019 presagió demandas contra Google y Amazon. La FTC ya ha empezado a indagar sobre Microsoft, según el WSJ.
Nvidia domina la producci...
Para seguir leyendo este artículo de Cinco Días necesitas una suscripción Premium de EL PAÍS
Los gigantes que inviertan mucho en IA también tendrán que invertir en asesoramiento jurídico. Los reguladores prefieren actuar con rapidez para proteger la competencia. Pero la Comisión Federal de Comercio (FTC) de EE UU puede ser más importante para Microsoft que el Departamento de Justicia para Nvidia. Las agencias públicas se han dividido la responsabilidad de dirigir las investigaciones sobre ambas, según el NYT. Un acuerdo similar en 2019 presagió demandas contra Google y Amazon. La FTC ya ha empezado a indagar sobre Microsoft, según el WSJ.
Nvidia domina la producción de chips para entrenar sistemas de IA. Su software, usado por los desarrolladores para que las tareas puedan ejecutarse en paralelo en los chips, es a la vez omnipresente en la IA y patentado. Cualquier investigación se centraría probablemente en si los vínculos entre su software y su hardware inhiben la competencia, y en cómo distribuye la empresa sus chips. La antigua práctica de Intel de ofrecer incentivos a los clientes provocó una lucha legal de décadas con los reguladores europeos.
Pero es difícil que la posición de Nvidia se debilite. Hay pocas pruebas disponibles de mala conducta. El acuerdo abandonado por la firma con el diseñador de chips Arm demuestra que probablemente no pueda comprar tecnología escasa, pero no lo necesita. Los investigadores de IA y las empresas que quieren construir centros de datos avanzados no tienen más opción que usar Nvidia.
Microsoft puede ser más vulnerable. Sus acuerdos con OpenAI e Inflection AI le han permitido desplegar funciones de IA en su omnipresente software. Estos acuerdos pueden ser frágiles. Microsoft ha demostrado que tiene una influencia sustancial sobre OpenAI, pese a poseer menos del 50% de la filial con ánimo de lucro de esta. En marzo, el gigante acordó pagar a Inflection 650 millones de dólares en efectivo para usar sus modelos y contratar a la mayor parte de su personal. Su cofundador Mustafa Suleyman dirige ahora Microsoft AI. Parece una compra con otro nombre.
El valor de mercado de Microsoft, así como su gigantesca y creciente colección de centros de datos que pueden entrenar y ejecutar IA, le dan ventaja a la hora de respaldar nuevas empresas y lanzar sus productos. La FTC podría sostener que la influencia de Microsoft está ahogando la competencia.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías
Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, X y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días