¿Es la hora del pinchazo de la burbuja de los relojes de lujo?
Las exportaciones de relojes suizos se desploman en un 16% desde 2023
Los relojes Rolex son la última víctima del frenazo del sector de lujo. En los últimos dos años, el índice Subdial de relojes, que rastrea los precios de los pesos pesados en el mercado secundario se ha desplomado en un 35% desde las 40.000 libras (46.488 euros), hasta las 26.515 libras (30.816 euros). Las principales marcas ya han empezado a sentir las primeras réplicas de la desaceleración dentro del índice, y la firma de lujo suiza, Patek Philippe, ha liderado las caídas: su valor ha caído un 11,6% en el último año según su propio índice. Le siguen Tudor (-7,4%), Rolex (-6,3%) y Omega (-1,9%).
Es más, este mercado bajista ya ha tenido efecto en las exportaciones de los relojes de lujo suizos. Los pedidos se desplomaron en un 16% interanual en marzo, según el último informe de exportaciones de la Fédération de l’industrie Horlogère Suisse (Federación de la Industria Relojera Suiza). Se trata del descenso más pronunciado registrado desde el bum del lujo en plena pandemia. Las exportaciones valoradas en más de 3.000 francos (3.074 euros) se han disminuido en casi un 10% en el último año. Es la ley natural del mercado: todo lo que sube acaba cayendo.
La corrección del lujo se ha visto agravada por la desaceleración del gasto en China, país donde las importaciones de relojes suizos ha descendido en un 42% en comparación con marzo del año pasado, según Morgan Stanley. Edahn Golan, analista de artículos de lujo, explica a CincoDías que también está influida por la caída de la demanda en EE UU e, incluso, por los problemas entre los clientes más adinerados en gran medida debido a aprietos sectoriales. “En este caso, lo que estamos viendo no es solo un descenso de la demanda de los consumidores, sino más bien problemas internos de la industria”, apunta.
En el punto más alto del mercado, los relojes de lujo de cualquiera de las ‘Big Three’ marcas relojeras —Rolex, Audemars Piguet o Patek Philippe— podían venderse hasta tres veces su precio de venta al público en el mercado secundario. De hecho, Rolex, en respuesta, intentó capitalizar del mercado de segunda mano tras lanzar su propio programa de relojes de segunda mano certificados en 2022. Este programa permitía a los usuarios devolver relojes con al menos tres años de antigüedad al mercado minorista justo en el momento cuando las ventas alcanzaban nuevos máximos. Además, Rolex incluía un certificado de autenticidad cuando se devolvía el producto al fabricante, un detalle que daba más seguridad a los compradores en el mercado de segunda mano.
En 2020, al inicio de la crisis sanitaria, los precios de los Rolex se dispararon junto a otras clases de activos alternativos, como los cromos deportivos y las criptodivisas. Los modelos de relojes de entre 5.000 y 20.000 dólares inundaron al mercado secundario, aunque en los últimos años esa burbuja parece haber estallado: el precio de reventa de los relojes de lujo se ha desplomado un 34% desde sus máximos de 2022, según la consultora WatchCharts, que hace un seguimiento de los precios en base de su propio índice. Un Rolex usado es un 10% más barato este año, mientras que un Piguet es un 13% más asequible, según elaboraciones de WatchCharts.
“Lo que teníamos en 2021 y 2022 en cierto modo se ha acabado, pero los precios no se reducirán a la mitad, se trata más bien de limitaciones en las materias primas”, sugiere Golan a CincoDías. Además, Golan comenta que las sanciones recientes del G7 a diamantes provenientes de Rusia ha añadido más dificultades al mercado, afectando sobre todo a modelos que incorporan a esta piedra preciosa.
No obstante, en el complejo comercial de lujo de Canalejas, en Madrid, la demanda por los Rolex sigue al alza. Los tiempos de espera para modelos clásicos como el Rolex Oyster Perpetual en la Joyería Grassy, un distribuidor oficial de Rolex, se sitúan al entorno de los dos años. “Ahora mismo no estamos tomando nuevos pedidos, a menos de que sean de oro”, reconoce un empleado.
Los relojes siguen brillando más en el mercado secundario. Aunque no se puede comparar con el frenesí registrado en plena pandemia, el precio medio de un reloj de lujo en el mercado minorista se sitúa, de media, en los 29.368 dólares (27.381 en euros), muy por encima del precio original.
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