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En colaboración conLa Ley

Enrique Sanz (Mutualidad): “Nunca nos hemos opuesto a la pasarela al RETA, siempre que no perjudique a los mutualistas”

El presidente de la Mutualidad apoya la solución que propone el Gobierno de pasarela al RETA, salvo en lo que concierne al cierre de la alternatividad en 2027

Enrique Sanz Fernández-Lomana, presidente de la Mutualidad
Enrique Sanz Fernández-Lomana, presidente de la MutualidadPablo Monge

Enrique Sanz Fernández-Lomana saca pecho de las cifras de la Mutualidad. “Somos la primera mutualidad de previsión social de España, con más de 10.500 millones de euros de ahorro gestionado, 210.000 mutualistas, de los cuales 60.000 son alternativos, y más de 525 millones de fondos propios no comprometidos”, expone. “En el último año se recibieron 660 millones de euros de ahorro, lo que demuestra la confianza de los mutualistas”, añade.

Con estos datos el presidente de la Mutualidad no comparte que la última propuesta del Gobierno para regular la pasarela al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) siga incluyendo la eliminación de la alternatividad a partir de 2027. Y es que, si la medida sale adelante, a partir de ese año los abogados que se colegien pasarían directamente al RETA y no podrían elegir entre el modelo público y el privado.

Ante la posibilidad del fin de la alternatividad, Sanz Fernández-Lomana confiesa que dos tercios de su actividad ya se dedican al ahorro complementario, es decir, al de los mutualistas que complementan su pensión pública con la privada. “En este momento de los 10.500 millones más o menos que estamos gestionando de ahorro, unos 7.500 millones son de ahorro complementario”, precisa. “Esto garantiza el futuro de la Mutualidad si se cierra la alternatividad, de hecho, llevamos tiempo trabajando en que la complementariedad gane peso en nuestra actividad”, concluye.

La reclamación de los mutualistas

El presidente de la Mutualidad no es ajeno a las reclamaciones que desde hace casi año y medio han realizado distintos colectivos de mutualistas, debido a los bajos capitales de jubilación acumulados que no les garantizan pensiones adecuadas en el momento de su retiro. Es por ello, que estos grupos quieren trasladarse al sistema público, transfiriendo sus ahorros acumulados en la Mutualidad para convertirlos en años de cotización en el RETA. Un proceso sobre el que Sanz Fernández-Lomana comenta que no es competencia de la Mutualidad sino del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. “La Mutualidad ha respaldado la posibilidad de la pasarela, es decir, el traspaso de los ahorros a la Seguridad Social, que no es algo nuevo, pero siempre dentro de un marco que no perjudique a los demás mutualistas”, señala.

Sin embargo, Sanz Fernández-Lomana recalca que esta situación de bajos capitales de jubilación afecta a una pequeña parte de los mutualistas. “De los 60.000 mutualistas alternativos, menos del 5% se encuentra en esa situación de vulnerabilidad con menos de 500 euros de pensión de jubilación, mientras que en el régimen público del RETA hay un 35% que pensionistas que no llegan a la pensión mínima”, afirma.

El directivo defiende además que los mutualistas que han acumulado poco capital son los que han ahorrado poco y que, además lo sabían. “Desde 2018 desde la entidad siempre se ha informado trimestralmente de las aportaciones realizadas, así como del capital esperado en el momento de la jubilación”, comenta. Asimismo, insiste en que una de las principales misiones de la Mutualidad en los últimos años ha sido la de incentivar que los mutualistas incrementen sus aportaciones. “Hace cuatro años pusimos en marcha el Plan 70.000 para llamar de forma individual a los mutualistas alternativos, no obstante, de los más de 20.000 contactos realizados hasta la fecha solo el 15% ha aumentado sus aportaciones”, revela.

La propuesta del Gobierno

El pasado mes de septiembre el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones planteó resolver esta situación a través de una enmienda en una ley que ya estaba en marcha, la Ley de eficiencia de la Justicia, aprobada recientemente. En esa enmienda se otorga un plazo de tres meses al Gobierno para regular la pasarela de la Mutualidad al RETA.

Según la última propuesta del Gobierno, que aún no ha logrado los apoyos parlamentarios para salir adelante, podrán acceder a la pasarela al RETA todos los mutualistas que lo sean desde antes de 2013 y ya no es necesario que cumplan con el criterio de vulnerabilidad. Además, se mantiene el cierre de la alternatividad en 2027 y se define el factor de cambio, de manera que, para pasar al sistema público los mutualistas deberán pagar lo que hubieran pagado en el RETA con el ajuste del IPC y con la aplicación de un coeficiente de corrección del 0,77 %.


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