Los jueces empiezan a comunicar a los clientes morosos su inclusión en el fichero de la Abogacía
El Juzgado de Primera Instancia de Marbella es uno de los primeros en dar por válido la forma de comunicación del fichero
La justicia española reconoce, en las primeras resoluciones judiciales, la recién estrenada funcionalidad del Registro de Impagados Judiciales (RIJ) que permite a los abogados hacer el requerimiento de pago al deudor y la notificación de inclusión en el fichero de morosos de la Abogacía a través del órgano judicial, en el seno del procedimiento judicial en curso.
Ha sido el Juzgado de Primera Instancia de Marbella uno de los primeros en dar por válido la forma de comunicación del fichero, ordenando dar traslado de la cláusula RIJ al deudor demandado en un procedimiento de ejecución.
Esta diligencia permite dar cumplimiento a los requisitos de notificación exigidos por el artículo 20 de la actual Ley de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales al señalar lo siguiente: “…Se tiene por vertidas las manifestaciones contenidas en los escritos, en especial, la comunicación de inicio de acciones para incluir las deudas reclamadas en el presente procedimiento en el Sistema de Información Crediticia o fichero de morosos Registro de Impagados Judiciales (RIJ). Dese traslado de su contenido a las demás partes personadas para su conocimiento y efectos oportunos”.
El director general del Registro de Impagados Judiciales, Enrique Rodríguez Zarza, destaca “el nuevo hito jurídico y tecnológico que supone el aval de la justicia española en el uso de la cláusula RIJ, como instrumento legal para acelerar el recobro y prevenir la morosidad en nuestro país. El Sistema de Información Crediticia de la Abogacía española se consolida así como el más garantista del país tras el reconocimiento de la reciente jurisprudencia del Tribunal Supremo en materia de ficheros de morosidad”.
Cláusula RIJ
La cláusula RIJ es un instrumento legal utilizado por abogados que permite a particulares, empresas, profesionales y autónomos su uso, incluyéndola en sus contratos con clientes y escritos judiciales para protegerse de los impagos y mejorar exponencialmente la tasa de recobro. Igualmente, este medio legal puede ser utilizado por los propios letrados para evitar riesgos de impagos en sus despachos profesionales.