Silver Economy: una economía de retos
Es aquella actividad orientada a atender las necesidades de las personas mayores, así como las necesidades de sus familias y cuidadores
El mundo envejece. España envejece y no podemos permanecer impasibles. La ONU estima que, en 2050, habrá 2.000 millones de personas mayores, lo que supone que el 22% de los habitantes del planeta será mayor de 70 años. Desde todos los ámbitos de la sociedad esta realidad supone un problema, pero también trae grandes retos y oportunidades para el emprendimiento. El envejecimiento poblacional mundial genera, entre otras cosas, el reto de plantear soluciones a las demandas sociales, a los nuevos consumidores y a la nueva sociedad en la que confluyen digitalización, envejecimiento y post pandemia.
Todos los sectores de la economía, incluido el sector legal, deben adelantarse, analizar y explorar las oportunidades de negocio que nos trae la Silver Economy, entendida como aquella actividad económica específica orientada a atender las necesidades y motivaciones de las personas mayores, así como las necesidades de sus familias y cuidadores. En este sentido, tiene suma importancia ocuparse de la transformación de la oferta de las empresas para, con una oferta segmentada y concreta, adaptarse al cambio demográfico. Es lo que yo llamo silverización de la economía, en referencia a ese proceso de adaptación. La silverización significa que todos los sectores son susceptibles de ser reinterpretados en base a la demografía de la longevidad.
Las firmas y despachos deben también ir adaptándose a este nuevo modelo, que es la economía del futuro, entre otras cosas, planificando y adaptando su oferta a la demanda más longeva. Por supuesto, también hay que apoyar al emprendimiento en la nueva era de la economía de los cuidados y la creciente demanda de servicios por los más mayores.
Las pequeñas y medianas empresas (PYMES) serán las que mayores oportunidades experimentarán en sus diferentes sectores: sanitario, ocio y bienestar, moda, turismo, residencial, financiero, hogar, estético (ageing well) o tecnológico.
Obtener un buen estudio de mercado de los clientes, definir y diseñar bien los modelos de negocio para adaptarlos a esta economía y desarrollar productos y servicios relacionados con la Silver Economy será clave para que las organizaciones sobrevivan y saquen partido del contexto sociodemográfico.
No solo las empresas deben enfocarse hacia este tipo de economía. La administración pública tiene un papel clave para desarrollar servicios y nuevos modelos económicos (economía mixta, economía social de mercado) adaptados a la economía plateada.
Existen dos ejes fundamentales que representan una gran oportunidad y en los que se debe pasar a la acción de inmediato. Por un lado, el eje de los cuidados. Pronto viviremos en una sociedad de personas centenarias cuidadas por septuagenarios, a su vez cuidados por los hijos de la inmigración.
La tecnología tiene un papel fundamental. Las nuevas tecnologías, como la IA, el Big Data o soluciones como la domótica, ayudan y facilitan mejores condiciones de vida para las personas mayores y sus familias. Veremos fuertes inversiones en age tech.
Por otro lado, hay que tener en cuenta el eje del envejecimiento activo. No se trata solamente de vivir más, sino de vivir mejor y de estar más activos. Probablemente, más activos laboralmente y, desde luego, viviendo intensamente: haciendo turismo, consumiendo cultura, practicando deporte, etc. Toda solución o producto que aporte y beneficie en este sentido, tendrá éxito.
Para el derecho y el sector legal hay unas oportunidades tremendas en la Silver Economy, porque existe mucha demanda jurídica por parte de los colectivos sénior: desde la asesoría en materia de fiscalidad, hasta los seguros de dependencia (con gran futuro), pasando por los derechos digitales o el asesoramiento en materia de pensiones y en la gestión patrimonial para una vida de cien años. Tampoco podemos olvidarnos de la asesoría en relación con las administraciones, las ayudas a la dependencia y demás prestaciones, entre otras cosas.
La realidad es que, tras la jubilación, aparecen para el sénior y su entorno familiar muchas de estas preocupaciones. La necesidad de hacer trámites, como la petición de la pensión de viudedad o de jubilación, tienen un componente técnico y legal importante e implican tal burocracia, que su manejo se vuelve especialmente complicado para la gran mayoría de ciudadanos, por lo que se hace todavía más necesario contar con el asesoramiento adecuado. El desarrollo de productos específicos y soluciones para hacer más fácil todo esto, como las plataformas digitales o el auge de los abogados con atención online, será clave. Por eso, es muy importante poner el foco en atender las necesidades de asesoramiento legal para este segmento de la población, desarrollando propuestas integrales basadas en tecnología aplicada al derecho.
Analizando el desarrollo de los diferentes sectores y, especialmente, del sector legal podemos concluir que el espacio de mejora de la vida de los mayores es muy grande y relevante. La crisis del coronavirus nos ha hecho tomar más conciencia de la importancia de los adultos mayores y de las soluciones tecnológicas para este sector de población. Vamos a ver una aceleración de la transformación de la sociedad hacia modelos más centrados en todo esto. La Silver Economy entra con fuerza para convertir estos retos en una oportunidad y generar empleo, además de mejorar la calidad de vida de las personas y, también, la sociedad.
Juan Carlos Alcaide, director del área de consultoría en Silver Economy de Auren, CEO y fundador de The Silver Economy Company y autor de Silver Economy. Mayores de 65: el nuevo target.