_
_
_
_

Kalfrisa ha crecido con los tiempos apostando por la sostenibilidad y la vanguardia tecnológica

Especializada en soluciones tecnológicas de recuperación de calor, calentamiento de aire industrial, tratamiento y control de emisiones industriales y valorización de residuos, esta empresa zaragozana exporta un 60% de su producción a 50 países

Recuperadores de Kalfrisa.
Recuperadores de Kalfrisa.FOTO CEDIDA POR LA EMPRESA

La historia de Kalfrisa, una empresa nacida en Zaragoza en los años sesenta, es el reflejo de cómo una firma familiar ha sabido transformarse y adaptarse a las demandas del mercado industrial. Lo que comenzó como un negocio familiar, enfocado en la producción de equipos de calefacción y refrigeración industrial, ha evolucionado hacia una compañía referente en recuperación de calor, calentamiento de aire industrial, tratamiento y control de emisiones industriales y valorización de residuos. Hoy en día, esta firma zaragozana exporta en torno al 60% de su producción a algo más de 50 países y se ha convertido en un nombre reconocido dentro del sector industrial global.

“En los inicios, con una España en plena transformación económica y con un sector industrial en crecimiento, Kalfrisa se centró en la calidad y la innovación, lo que nos permitió ganar terreno en el mercado nacional.”, explica Pablo Izuzquiza, actual director comercial. “Con el paso del tiempo, la empresa expandió sus operaciones, y en la década de los setenta, comenzaron las primeras exportaciones gracias a la obtención de licencias de empresas alemanas y francesas”.

Los años ochenta marcaron un punto de inflexión para la compañía. El endurecimiento de las normativas medioambientales en Europa, impulsó a la empresa a enfocarse en consolidar su presencia en el sector de recuperadores de calor y a desarrollar tecnologías eficientes para la destrucción térmica y valorización de residuos.

El desarrollo de estas tecnologías, permitieron a la empresa continuar su diversificación incluyendo en su portoflio hornos crematorios y equipos específicos para el tratamiento y depuración de gases residuales mediante la eliminación de los componentes orgánicos volátiles (COV’s)

En esta fase, la internacionalización fue clave para el crecimiento de la compañía. Kalfrisa comenzó a exportar sus soluciones a mercados europeos, y más tarde a escala mundial, adaptándose a las estrictas normativas medioambientales de cada país. “Fue un desafío, pero también una oportunidad. Las empresas necesitaban tecnologías más limpias y eficientes, y nosotros estábamos en una buena posición para ofrecerlas”, destaca Izuzquiza.

Actualmente, Kalfrisa vende equipos en todo el mundo, sus principales mercados incluyen Europa, Latinoamérica, India y Oriente Medio. Estos equipos no solo mejoran la eficiencia energética, sino que también ayudan a reducir las emisiones de gases contaminantes, un factor crucial en el contexto actual de lucha contra el cambio climático.

Expansión internacional

Uno de los elementos clave en la expansión de la compañía ha sido su capacidad para adaptarse a los mercados internacionales; un proceso en el que algunos socios estratégicos han desempeñado un papel fundamental. “El Banco Sabadell nos ha brindado un apoyo constante en nuestras operaciones en el extranjero. Su equipo, tanto en España como en otros países, nos ha acompañado en negociaciones y nos ha proporcionado la financiación necesaria para realizar grandes proyectos internacionales”, señala Izuzquiza.

El directivo menciona con especial gratitud a Alicia Vicente, representante del banco en Zaragoza, y al equipo de profesionales de la entidad financiera en Turquía y Latinoamérica. “Gracias a ellos, hemos podido abrir fábricas en Perú e India y establecer una oficina en Polonia. Su presencia local y su apoyo financiero han sido decisivos para el crecimiento de nuestra empresa fuera de Europa”, añade.

Este respaldo no solo ha permitido a Kalfrisa aumentar su volumen de exportación, sino que también ha fortalecido su presencia en mercados emergentes. “Tener un socio financiero que comprende los desafíos de la internacionalización es esencial para garantizar el éxito a largo plazo, porque te puede abrir los ojos sobre mercados que no habías contemplado e incluso ayudarte a negociar in situ”.

El crecimiento de la compañía ha sido constante en los últimos cinco años, duplicando su facturación desde los 10 millones de euros en 2019 hasta los 25 millones previstos para 2024. Sin embargo, este éxito ha traído consigo nuevos retos. “Nuestro mayor desafío ahora es consolidar este crecimiento y mantener un equilibrio entre nuestras diferentes líneas de negocio”, admite Pablo Izuzquiza.

Uno de los objetivos a corto plazo de la empresa es continuar su expansión en Europa del Este y Asia, donde las oportunidades de negocio son cada vez más prometedoras. Además, el departamento de I+D+i de la firma está desarrollando nuevas tecnologías para adaptarse a la transición hacia energías más limpias. “Este año hemos presentado un horno crematorio de hidrógeno, una innovación que refuerza nuestro compromiso con la sostenibilidad y la reducción de la huella de carbono”, comenta el directivo.

Estar siempre a la vanguardia

Para Kalfrisa, uno de los factores decisivos en el éxito de la compañía en estas casi seis décadas ha sido su capacidad para ofrecer productos adaptados a las necesidades de cada mercado. “Nuestros clientes buscan soluciones que no solo sean eficientes, sino también sostenibles. Y siempre hemos apostado por la calidad y la innovación para estar a la altura de esas expectativas”.

En este sentido, la empresa no solo mira hacia la expansión geográfica, sino también hacia la transición energética. “Hemos invertido en el desarrollo de tecnologías limpias en procesos térmicos, sustituyendo los combustibles fósiles por el hidrógeno o apostando por la electrificación de los mismos, reflejando así nuestro compromiso con la sostenibilidad. Las normativas ambientales son cada vez más estrictas, y eso genera una demanda de equipos más eficientes y menos contaminantes. Y queremos estar en la vanguardia”, asegura.

Además, la empresa se ha adaptado rápidamente a los cambios del mercado tanto en Europa como en Asia y Latinoamérica. “No solo exportamos productos, sino también conocimiento y soluciones personalizadas que responden a los desafíos específicos de cada país”, concluye el director comercial de esta firma maña, referente en sectores como la siderurgia, la minería y la automoción, donde sus tecnologías permiten una mejora en la eficiencia energética y una reducción de la huella de carbono. “Nuestra meta es seguir aportando valor en todas estas industrias, expandiéndonos con fuerza y manteniendo la confianza de nuestros clientes a nivel global”.

Exterior de la sede de Kalfrisa en Malpica (Aragón).
Exterior de la sede de Kalfrisa en Malpica (Aragón).

El éxito radica en generar confianza

Basándose en las décadas de experiencia en internacionalización que posee Kalfrisa, su director comercial ofrece un consejo para las empresas que desean aventurarse en la exportación: “Es un proceso que debe hacerse poco a poco, y nunca una solución de emergencia cuando las cosas van mal en el mercado local”. Y es que vender fuera de nuestras fronteras, según Pablo Izuzquiza, “requiere planificación, conocimiento del mercado y, sobre todo, buenos compañeros de viaje”.

Además, recalca la importancia de contar con el apoyo de socios financieros y expertos locales que entiendan los mercados en los que se quiere operar. “Porque, a la larga, el éxito en la exportación no solo se basa en la calidad del producto, sino en la confianza que puedas generar en los clientes internacionales”.

Ficha clave

Nombre: Kalfrisa.
Año fundación: 1965.
Localización: Zaragoza, España.
Facturación: 25 millones de euros (previsión cierre 2024).
Producto/servicio que exporta: sistemas de recuperación de calor y control de emisiones.
Mercados en los que exporta: Europa, Latinoamérica, India y Oriente Medio.
Principales socios para la exportación: asesoramiento y financiación con Banco Sabadell. Industrial, cuentan con fabricantes locales en Perú e India.
Su mayor reto: consolidar el crecimiento reciente en mercados internacionales.
Objetivo futuro: expandirse por Europa del Este y Asia.
Un consejo: la exportación debe ser un proceso planificado y gradual, no una solución de emergencia.

Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

_
_