La implementación de la IA en las compras, limitada por las preocupaciones de los consumidores
Solo la mitad de los españoles indica que podría adoptarla mientras que el 33% se muestra reacio a hacer uso de esta tecnología en el comercio
Los consumidores no manifiestan mucho entusiasmo para adoptar la Inteligencia Artificial en sus compras. Solo el 53% de los consumidores considera que podría adoptarla, mientras que un tercio de la población se muestra reacia a utilizar estas tecnologías en el comercio, según destaca el nuevo estudio sobre los hábitos de consumo de los españoles, publicado este miércoles por el Observatorio Cetelem. La incorporación de herramientas como chatbots o sistemas de pago automatizados no logran convencer a los españoles, que sienten cierta preocupación por el uso de sus datos y su privacidad.
El informe revela que la adopción de estas nuevas tecnologías en las compras no logra convencer totalmente. Si bien más de la mitad de los encuestados reconoce que la IA tiene interés para encontrar productos más rápidamente, o más personalizados, los consumidores no están a favor de la implementación generalizada de la IA en los procesos de compras. De hecho, solo un 14% de los 2.200 encuestados se considera dispuesto a adoptar nuevas tecnologías de IA para mejorar su experiencia de consumo.
El Observatorio Cetelem, que analiza desde hace 25 años las tendencias de consumo de los españoles, revela que los chatbots impulsados por IA en las consultas de atención al cliente generan rechazo en 5 de cada 10 consumidores. Si bien un 40% de la población los considera útiles a la hora de resolver consultas sencillas, más de la mitad de los encuestados indican que prefieren hablar con seres humanos. Es más, solo un 7% de los encuestados prefiere a los chatbots, principalmente porque se encuentran disponibles en cualquier momento.
En cuanto al uso de la IA en los procesos de pago, los consumidores están divididos. Un 40% de los consumidores prefiere acudir a métodos de seguridad tradicionales sin IA, pero un 22% cree que puede ayudar a que los procesos de pago sean más seguros y eficientes.
La lenta adopción de la IA en los procesos de compra encuentra su fuente en la preocupación que sienten los consumidores respeto al tratamiento de sus datos. Un 34% de la población reconoce estar muy preocupado por su privacidad y prefiere no recibir publicidad personalizada, mientras que un 39% de los encuestados indica tener algunas preocupaciones superadas por el beneficio de la personalización.
Por otro lado, un 27% dice sentirse muy cómodo con esta tecnología siempre y cuando su información se maneje de manera segura y privada. La mayoría de los encuestados consideran la IA muy útil a la hora de comparar precios o buscar cupones, pero prefieren tener un control total sobre su compra final.
Jesús Lucía, técnico de comunicación del Observatorio Cetelem, explica que los productos que tienen que ver con las nuevas tecnologías, como los dispositivos móviles o los videojuegos, se venden mayoritariamente por internet -un 55% de estos productos están comprados por este canal- lo que favorece la implementación de la Inteligencia Artificial. Sin embargo, para la compra de electrodomésticos, ropa, o muebles de hogar, los consumidores prefieren acudir a las tiendas físicas.
En un tiempo marcado por la inflación, Lucía explica que el precio de los productos sigue siendo el principal factor que influye en los procesos de compras, seguido por la variedad de productos, y en tercer lugar, la calidad. Si bien cada vez más consumidores acuden a la Inteligencia Artificial para sus compras, su adopción por los Españoles no tiene hasta ahora un impacto mayor en el consumo de los españoles.