Hacienda da a las autonomías más recursos que nunca y niega un trato bilateral con Cataluña
Las autonomías, gobernadas en su mayoría por el PP, critican el reparto del ajuste del déficit y piden abrir el melón de la financiación
El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) se ha reunido este lunes entre las críticas de la mayor parte de las autonomías por la negociación bilateral entre el PSOE y ERC para condonar parte de la deuda catalana. El ambiente también estaba caldeado debido a que la agenda de la reunión no incluía la reforma del sistema de financiación y a que las regiones gobernadas por el PP denunciaban un reparto desigual del ajuste del déficit ahora que vuelven a entrar en vigor las reglas fiscales de la Unión Europea. Por ello, el Gobierno de coalición ha respondido anunciando a las autonomías que recibirán los mayores recursos de toda su historia. A su vez, la vicepresidenta cuarta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, negó cualquier conversación bilateral con la Generalitat y recordó que la asunción parcial de la deuda beneficiará a las 15 comunidades de régimen común.
Los recursos que recibirán las regiones ascenderán a los 154.467 millones de euros, un incremento de casi el 15% respecto a 2023. En euros, el volumen supone un aumento de 20.000 millones que podrán destinarse a fortalecer las políticas públicas, avanzan fuentes de Hacienda. La cifra total incluye los 134.658 millones de las entregas a cuenta, un 8,3% más que en 2023, y la liquidación de 2022, que asciende a 20.746 millones. En los cinco años de gobierno de Pedro Sánchez las comunidades han recibido un 40% más de recursos que en los cinco últimos años de gobierno de Mariano Rajoy, lo que supone casi 180.000 millones más, resaltan las mismas fuentes.
Para las autonomías, sin embargo, hay otros asuntos clave más allá de la asignación de recursos. Uno de ellos es un ajuste del déficit “arbitrario”, puesto que va a “recaer principalmente sobre las comunidades autónomas mientras que el Gobierno central tendrá mayor margen de maniobra”, según denuncian fuentes de los gobiernos autonómicos del PP. Según detalló Montero, sin embargo, se ha flexibilizado el objetivo de déficit de las comunidades de 2024, que pasará a ser del 0,1%. Esto supone una décima más de margen fiscal respecto al objetivo de equilibrio presupuestario fijado en el Programa de Estabilidad de abril remitido a la Comisión Europa.
Desde el Gobierno explican que esa décima de mayor espacio fiscal para las regiones la asumirá la Administración Central, “que será una vez más quien tendrá que hacer un mayor esfuerzo de reducción de déficit como ocurrió durante la pandemia y la guerra de Ucrania”. De su lado, los territorios del PP reclaman que exista un “reparto equitativo y proporcional” entre administraciones, puesto que no es justo que “el Gobierno central se reserve toda la capacidad de déficit y al resto no nos dejen prácticamente ningún margen”.
Otro de los asuntos espinosos es la negociación bilateral entre el Gobierno y Cataluña, algo que, denuncian los gobiernos del PP, “supone un agravio comparativo con el resto de territorios”. En este punto, visiblemente molesta, Montero insistió en que “el compromiso del Gobierno es que la Administración Central asuma parte de la deuda de todas las comunidades de régimen común”, estén o no suscritas al fondo de liquidez autonómico. También negó que se haya producido cualquier conversación bilateral con la Generalitat en la que se trate la singularidad de la región.
En cuanto a la financiación autonómica, un modelo caduco en el que hay regiones beneficiadas y otras perjudicadas, la vicepresidenta cuarta confió en avanzar en un rediseño a lo largo de la nueva legislatura. En Hacienda son conscientes de que cada territorio arrima el ascua a su sardina para intentar dar más o menos peso a los criterios que determinan el modelo de reparto. Sin embargo, apuntó Montero, hay que tener en cuenta que una eventual reforma necesita de “mayoría cualificada en las Cortes, más allá del pronunciamiento de cada territorio”. Por eso, ironizó sobre lo que votará la formación de Alberto Núñez Feijóo en el Congreso y el Senado teniendo en cuenta que Madrid, Galicia y Andalucía, las tres gobernadas por el PP, “mantienen posturas diferentes”. Montero aprovechó para pedir a las regiones que abandonen las posturas de máximos para llegar a un consenso.
Municipios
Horas antes también se ha celebrado la reunión de la Comisión Nacional de Administración Local (CNAL), en la que el Gobierno ha trasladado que los ayuntamientos españoles recibirán 28.557 millones de euros en recursos en 2024, un 22,6% más que en el año previo. Estos 5.260 millones adicionales llevan a que la cantidad sea la más elevada de la historia. En la cifra global de recursos del sistema de financiación, recuerda Hacienda, se incluyen tanto las entregas a cuenta (23.773 millones de euros) como la liquidación de 2022 (4.784 millones).
En el encuentro, Montero también ha avanzado que el Gobierno ha decidido flexibilizar la senda de déficit para el subsector de las entidades locales, de manera que pasarán del objetivo de superávit del 0,2% en 2024 contemplado en el Programa de Estabilidad de abril a simplemente tener equilibrio presupuestario. “Esas dos décimas de margen las asumirá la Administración Central, que hará un mayor esfuerzo de reducción de déficit”, apunta Hacienda. “Ello permite a estas corporaciones locales disponer de un mayor margen de gasto y de inversión, que redundará en mejores servicios municipales a los ciudadanos”.
En paralelo, también se han comunicado los objetivos de deuda pública. En el caso de los municipios, tendrán que situarse en el 1,4% del PIB en 2024, en el 1,3% en 2025 y en el 1,3% en 2026, contribuyendo así al objetivo de reducción marcado por el Gobierno.
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