El Ejecutivo adelanta a Bruselas que en 2026 la inversión en I+D+i alcanzará el 2,5% del PIB

Se mejora y se adelanta en un año el objetivo recogido en la Estrategia de Ciencia, Tecnología e Innovación que fijaba una meta del 2,12% del PIB pero en 2027

Calar Alto, a la vanguardia mundial de la investigación y la tecnología en el campo de la astronomía.JUNTA DE ANDALUCÍA (JUNTA DE ANDALUCÍA)

Las reformas puestas en marcha por el Gobierno desde 2018, están teniendo sus frutos y todo apunta a que seguirán prolongando su influencia al menos hasta 2026, según se recoge en el Programa de Estabilidad 2023-2026 remitido por el Ejecutivo a Bruselas.

El despliegue del Plan de Recuperación con medidas para fomentar el autoconsumo energético o las actuaciones frente al Covid, como los ERTE, el ingreso mínimo vital o las ayudas directas y avales a empresas, han tenido un impacto estructural en la economía, al tiempo que se han generado importantes cambios en el ya anquilosado patrón de crecimiento económico basado fundamentalmente en el ladrillo.

Sin embargo, será el componente tecnológico, reflejado a través de las inversiones en I+D+i el que de un paso de gigante y deje de lado el habitual retraso existente con respecto al resto de las grandes economías europeas. Su inversión ha pasado de representar el 1,2% del PIB en 2018 a cerrar el pasado año 2022 en el 1,5%. Sin embargo, su avance no finaliza aquí, ya que una vez se ha registrado una velocidad de crucero, el Gobierno estima que para 2026 la I+D+i alcance el 2,5% del PIB.

La inversión pública ha contribuido en un 50% al aumento, mientras que el sector privado ha respondido con la otra mitad. El informe El stock de capital en España y sus comunidades autónomas, publicado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie) y la Fundación BBVA, va en la misma línea al contemplar que tras el peso que en la inversión venía a ocupar el sector inmobiliario y que en 2007 representaba el 68%, ha ido reduciendo su peso hasta suponer prácticamente la mitad en 2022.

La inversión en activos más productivos, como en maquinaria, equipos, tecnologías de la información (TIC) e I+D+i que en 2007 representaban el 32%, se ha incrementado hasta representar actualmente la otra mitad. Esta realidad que ha venido experimentando la economía española durante las últimas décadas era un elemento diferenciador frente al resto de las grandes economías de referencia como EE UU, Francia, Reino Unido o Alemania, que si venían realizando procesos de inversión más productivos, centrados en la maquinaria, los activos TIC y la I+D.

La inversión en activos no inmobiliarios, por lo tanto, ha aumentado 18 puntos porcentuales en los últimos 15 años, pasando de suponer el 32% en 2007 al 50% en 2022.

Según el documento entregado a la Comisión Europea, el crecimiento potencial de la economía española se ha acelerado en 0,4 puntos desde 2018 y alcanzó al cierre de 2022 el 1,2%, tendencia que se mantendrá a lo largo de estos años hasta alcanzar el 1,6% en 2026, el doble del que se registraba en 2018.

En el mercado laboral también se ha reducido el paro estructural en más de 2 puntos, acercándose al objetivo del 9% de la población activa, al tiempo que la temporalidad ya converge gracias a la reforma laboral a niveles europeos, previéndose que tras el 21,1% del cierre de 2022, se reduzca al 14,1% en 2026. Este hecho provocará que la tasa de paro baje nuevamente en 2026 del 10%.

Esta buena marcha en el mercado de trabajo obedece en buena medida al impulso en la mejora del capital humano por la Formación Profesional (FP) que aumenta el peso de los trabajadores con habilidades digitales, el 4,4% de los ocupados.

Ambicioso objetivo

El objetivo adelantado a Bruselas de que la inversión en I+D+i alcanzará el 2,5% del PIB en 2026, no solo mejora esta ratio prevista en la Estrategia de Ciencia, Tecnología e Innovación, sino que la adelanta en un año. Este objetivo fijaba una meta inversora del 2,12% del PIB en el horizonte de 2027, lo que según la Fundación Cotec se alcanzaría prácticamente duplicando el volumen de inversión anual, hasta alcanzar los 35.000 millones de euros en 2027.

El incremento de la inversión en I+D de los últimos años a la sombra de los fondos europeos Next Generation EU, que comenzaron en 2021, son responsables en gran medida del avance.

La apuesta del Gobierno por la Formación Profesional, es otro factor que contribuye a la mejora tecnológica de la economía. El Consejo de Ministros aprobó 1.300 millones de euros y espera que en 2026 los alumnos de FP lleguen a 1,2 millones.


Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, Twitter y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días

Sobre la firma

Más información

Archivado En