Renault hará coches eléctricos asequibles para Ford en Europa
La alianza comenzará con la fabricación de dos turismos sobre plataformas como la del exitoso R5. No afectará a la planta de Valencia, que espera noticias de un nuevo modelo multienergía
Ford ha decidido fiarle a Renault su oferta de vehículos eléctricos asequibles. Según han informado ambas empresas este martes en un comunicado, la estadounidense y la francesa han firmado una alianza para que Renault haga los coches eléctricos asequibles —entiéndase por debajo de los 25.000 euros sin contar ayudas públicas— de Ford en Europa. El acuerdo comenzará con el desarrollo de dos turismos eléctricos sobre la plataforma Ampere, la división de vehículos eléctricos y software de Renault, en la que se hacen coches como el R5, hasta ahora el modelo eléctrico de más éxito de la compañía del rombo.
De esta forma, Ford encuentra una solución a su falta de oferta competitiva en el ámbito eléctrico a un precio razonable en Europa, un continente en el que lleva años reduciendo su presencia con caídas de producción notables en Almussafes (Valencia), Colonia (Alemania) y el cierre de la planta de Saarlouis (también en Alemania). A su vez, ambas empresas estudiarán la posibilidad de cooperar en el ámbito de los vehículos eléctricos comerciales.
No sería la primera alianza de este tipo que firma Ford, quien hace años ya se había aliado a Volkswagen en el ámbito de los vehículos comerciales en la época de Herbert Diess —el anterior consejero delegado del grupo alemán—. En principio, este anuncio no afectaría a la planta de Almussafes, ya que los dos modelos eléctricos se harán en las instalaciones de Renault en el norte de Francia, en el complejo ElectriCity. Se prevé que el primero de los dos modelos llegue al mercado a principios de 2028. En cuanto a la factoría valenciana, esta sigue a la espera de noticias sobre un nuevo modelo multienergía, el cual debería llegar en 2027, que le permita recuperar volumen de actividad y salir del Mecanismo RED al que está actualmente acogida —una especie de ERTE rotatorio para toda la plantilla—.
“Ford está evolucionando sus operaciones industriales en Europa, diseñadas para apoyar el cambio a vehículos multienergía y ofrecer opciones al cliente. La planta de Ford en Valencia seguirá desempeñando un papel crítico para llevar a cabo el plan de Ford de una cartera mejorada de vehículos de pasajeros en Europa. La asociación con Renault no tiene un impacto en nuestras operaciones en Valencia (...) Esperamos compartir más detalles sobre nuestras operaciones en Valencia en 2026”, ha asegurado la compañía del óvalo en un segundo comunicado.
Por otro lado, Ford ha incidido en la necesidad de que Europa “alinee los objetivos de CO2 con la realidad del mercado”. Cabe señalar que estas palabras llegan justo un día antes de que Bruselas se reúna con el sector para abordar las medidas que el motor pide para aumentar la competitividad del automóvil frente a China. Uno de los puntos clave de las conversaciones es la relajación o flexibilización de los objetivos de CO2, sobre todo la prohibición de vender coches de combustión en 2035.
“Lo cierto es que hay un gap muy importante entre la demanda de los clientes y las regulaciones medioambientales, y ese gap está presionando mucho en las inversiones de los fabricantes y en la accesibilidad a los clientes. Es aquí donde creemos que la plataforma de Renault ofrece buenas economías de escala”, ha indicado Jim Baumbick, presidente de Ford Europa, en una rueda de prensa con medios internacionales posterior al anuncio.
Concebidos por Ford y desarrollados con Renault, los dos vehículos ofrecerán “prestaciones en carretera únicas, el ADN auténtico de la marca Ford, así como una experiencia usuario intuitiva”, han dicho ambas marcas, que han asegurado que esto representa el primer paso de una nueva y ambiciosa ofensiva de producto de Ford en Europa. Se espera que el primero de los dos vehículos llegue a los concesionarios a principios de 2028.
“Esta alianza demuestra la solidez de nuestro saber hacer en materia de asociaciones y nuestra competitividad en Europa. A largo plazo, combinar nuestras fuerzas con Ford nos hará más innovadores y ágiles en un mercado automovilístico europeo en rápida transformación”, ha dicho François Provost, consejero delegado del grupo francés, que asumió el cargo a mitad de año en sustitución de Luca de Meo.
“Esta alianza estratégica constituye un paso importante para Ford y respalda nuestra estrategia de construir un negocio altamente eficiente y adaptado a los desafíos futuros en Europa. Vamos a combinar la escala industrial y las fortalezas de Renault en el vehículo eléctrico con el diseño icónico y las prestaciones de conducción específicas de Ford para crear vehículos divertidos, de alto rendimiento y que encarnen el espíritu Ford”, ha indicado, por su parte, el consejero delegado de Ford, Jim Farley.