Ya es oficial: los cajeros automáticos cambian para adaptarse a la ley de accesibilidad este 28 de junio
Máquinas expendedoras de billetes, dispensadores de turnos y terminales de autoservicio también se verán afectados


Los cajeros automáticos cumplen con la Ley 11/2023, que busca una mayor accesibilidad a los servicios bancarios, a partir de este sábado 28 de junio. Se trata de una normativa europea de 2019 que entra en vigor después de ser aprobada por el Gobierno hace dos años.
Estos cambios van dirigidos a todas aquellas personas que encuentran dificiltades para acceder a los servicios bancarios como pueden ser personas mayores, con discapacidad, o, simplemente, menos familiarizadas con el uso de la tecnología.
La normativa incorpora pantallas e interfaces más accesibles, con texto de mayor tamaño, iconos de alto contraste, brillo regulable y botones en relieve. También se incluye la posibilidad de conectar auriculares para recibir instrucciones por audio, así como una altura adaptada que facilita el uso de los cajeros a personas en silla de ruedas.

Las adaptaciones se han llevado a cabo de manera progresiva de forma que pudieran seguir operando hasta la fecha. Sin embargo, todos los nuevos cajeros que se instalen a partir del 28 de junio deberán cumplir con la ley.
¿Qué ocurre si no se cumple la normativa?
La normativa no solo se aplica los cajeros. Otros dispositivos como máquinas expendedoras de billetes, dispensadores de turnos y terminales de autoservicio también se verán afectados.
Se estima que el coste de la actualización de los cajeros se encuentra entre los 1.500 3.000 euros. Mientras que las multas por no cumplir la Ley 11/2023 van de los 30.000 euros en caso de infracciones leves a unos 150.000 a 1.000.000 euros por las infracciones muy graves.
La Unión Europea ha publicado la AccessibleEU, una guía dirigida a las empresas para ayudarles a llevar a cabo el cambio.