Los puertos españoles buscan rebajar su exposición a EE UU con mayores tráficos con Latinoamérica
Puertos del Estado y cinco Autoridades Portuarias participan en la feria Intermodal South America, con el mercado brasileño en el punto de mira
El sistema portuario español está a la caza de nuevo negocio hacia y desde Latinoamérica. Aprieta la política arancelaria impuesta por Donald Trump en Estados Unidos, principal mercado internacional para España en el movimiento de carga marítima, por delante de Brasil. Con ese tráfico de importación y exportación ya tocado desde primeros de febrero, y sumido en la absoluta incertidumbre, se trata de amortiguar el impacto. Y lo primero son las misiones comerciales: una delegación de Puertos del Estado, en la que se integran representantes de cinco autoridades portuarias, ha acudido a la feria Intermodal South America, que se celebra en Sao Paulo (Brasil) hasta el próximo jueves, con la misión de generar nuevos tráficos con Latinoamérica. Los principales puertos brasileños están en el objetivo.
Los puertos españoles movieron 65,7 millones de toneladas de mercancías y 1,7 millones de contenedores el año pasado con Latinoamérica. Brasil tiene un peso del 46% de ese volumen total de carga, con 30,2 millones de toneladas, y del 38% en los contenedores, rozando los 650.000 el año pasado.
Según las estadísticas que maneja Puertos del Estado (con datos de 2023), Estados Unidos es el principal emisor y receptor internacional para España, con 41,2 millones de toneladas (13,7 millones embarcadas en puertos españoles y 27,5 millones desembarcadas), seguido de Brasil (26,8 millones de toneladas), Marruecos (26,4 millones), Italia (24,7 millones) y China (19,9 millones). Las infraestructuras de este país pugnan con las portuguesas y con las del centro de Europa por servir de puerta de entrada a las mercancías que viajan entre América y Europa. México es el segundo destino y punto de origen más importante en Latinoamérica, con el que España intercambió 10,9 millones de toneladas en 2023.
Además de distintos responsables de Puertos del Estado, se ha trasladado hasta Sao Paulo personal de las autoridades portuarias de Barcelona, Bilbao, Bahía de Algeciras, Las Palmas y Valencia. Todas estas instituciones, con importantes relaciones tanto con puertos estadounidenses como brasileños, se han instalado en el Pabellón de España que coordina el ICEX. En su puesta en escena se presenta el sistema portuario español como una plataforma logística global que incluye 340 kilómetros de muelles, cerca de 100 millones de metros cuadrados de superficie logística, más de 600 grúas y conexiones marítimas con 200 puertos internacionales.
Desde Puertos del Estado se afirma que los 9,6 millones de toneladas que ha alcanzado el tráfico con Latinoamérica entre enero y febrero de este 2025 confirman la tendencia al alza de los último años y refuerza el interés estratégico de reforzar lazos con esa región. Al cierre de 2023, los puertos españoles con mayores volúmenes gestionados hacia o desde EE UU fueron el de Algeciras (6,9 millones de toneladas), Valencia (5,7 millones de toneladas), Huelva (5,4 millones), Cartagena (4,2 millones) y Bilbao (3,9 millones de toneladas). En cuanto al tráfico con Brasil, Algeciras vuelve a liderar la tabla con 4,9 millones de toneladas, seguido de Cartagena (3,3 millones), Barcelona (3,2 millones), Bilbao (3 millones) y Valencia (2,6 millones de toneladas).
El año pasado pasaron 557,8 millones de toneladas por los puertos de interés general, lo que supuso un incremento del 2,7% frente al tráfico de 2023. Las infraestructuras españolas recuperaron la senda al alza tras los vaivenes generados por la situación de inestabilidad en el Mar Rojo, lo que obligó a las navieras a desviar las rutas marítimas tradicionales procedentes de Asia. En algunos puntos esa situación provocó aumentos coyunturales de tráfico al convertirse en puerta de entrada en el Mediterráneo cuando anteriormente lo eran los puertos cercanos al Canal de Suez.
Cuando apenas se ha digerido la reconfiguración de la logística marítima mundial, con los referidos cambios de rutas y un nuevo mapa de alianzas entre grandes navieras, azota ahora la tormenta arancelaria de Trump, con envíos de productos industriales, alimentarios y químicos buscando nuevos destinos.
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