La Kings League de Piqué facturó más de 20 millones en su primer año completo de actividad
La sociedad detrás de la competición creada por el ex jugador del FC Barcelona logró también su primer beneficio en 2023
La Kings League, la competición de fútbol siete creada por el exfutbolista Gerard Piqué, generó unos ingresos de 20,5 millones de euros en su primer año completo de existencia, según las cuentas anuales de 2023 que acaba de depositar la sociedad que está detrás del torneo, Kings Competition SLU, que también generó su primer beneficio anual.
El torneo, que forma parte del conglomerado societario Kosmos del que Piqué es propietario, fue creado a finales de 2022, pero su primer partido se disputó el 1 de enero de 2023. Su arranque generó un seguimiento masivo: la audiencia media de aquel primer día fue de 450.000 personas, con picos cercanos a 800.000, a través de la plataforma de emisión de vídeo en directo Twitch. El secreto, entre otros, fue la implicación de algunos de los principales creadores de contenido del momento, como Ibai Llanos o The Grefg, o de exfutbolistas como Iker Casillas, que gestionan sus propios equipos en la competición.
La memoria financiera de Kings Competition está formulada en formato abreviado, con lo que no da detalles precisos sobre el origen de los ingresos de la competición. Sin embargo, esta contó desde el primer momento con un fuerte respaldo comercial. Patrocinios, entradas y merchandising son las tres principales fuentes de facturación, como explican fuentes del grupo Kosmos.
Días antes del primer partido, la plataforma de empleo InfoJobs se convirtió en su patrocinador principal, asociando desde entonces, y hasta la actualidad, su marca al nombre de la competición. También Cupra, la enseña de automóviles prémium nacida de Seat, pone su nombre al pabellón que acoge la mayoría de los partidos, el Cupra Arena, situado a las afueras de Barcelona. Unos meses después se sumó Inditex a través de Oysho, la marca del grupo enfocada a la práctica deportiva, para convertirse en el principal patrocinador de la versión femenina de la competición, la Queens League.
Adidas es el socio en equipamiento deportivo, vistiendo a todos los equipos que compiten, e incluso Mediaset compró aquel año los derechos de emisión en abierto de los partidos, a través de Cuatro, tanto de las Kings como de la Queens League, una relación que duró unos pocos meses. Grefusa, la compañía fabricante de snacks, y la cervecera Mahou también están ligadas a la iniciativa de Piqué desde su nacimiento.
Pero además de los acuerdos comerciales, otra fuente de negocio fueron los dos eventos masivos que la competición celebró, primero, en el Camp Nou de Barcelona, y después en el Estadio Metropolitano de Madrid. El primero acogió la fase final de la primera edición o split, en la jerga que utiliza el torneo. Una final a cuatro equipos, entonces solo de la versión masculina, que congregó en marzo de 2023 a más de 92.000 aficionados en el estadio del FC Barcelona. La segunda, ya entrado verano y con la Queens League incluida, tuvo una afluencia inferior a los 60.000 espectadores. En otoño habría un tercer evento, en el estadio de La Rosaleda de Málaga, con 30.000 espectadores.
Con todo ello, la cuenta de resultados de Kings Competition refleja un beneficio neto en 2023 de casi 356.000 euros, frente a la pérdida de 163.000 del año anterior, en el que inició su actividad societaria.
Expansión internacional
La competición ha seguido ganando dimensión, y la expectativa es haber cerrado 2024 con un alza exponencial de los ingresos. Hace justo un año lanzó oficialmente la edición americana del torneo, la Américas Kings League, y en mayo cerró una ronda de inversión de 60 millones de euros para acelerar su expansión internacional. A través de ella entraron inversores como Left Lane Capital, firma global de capital riesgo, o el holding especializado en deporte Fillip.
Con esos fondos sufragará sus siguientes pasos en la internacionalización. En noviembre dio el primero con el nacimiento de la edición italiana, y hace unos días finalizó la primera edición de su primer mundial por países, celebrado en Italia. El estadio de la Juventus albergó la final, con 40.000 espectadores. En el horizonte tiene llegar a “los principales países futbolísticos del mundo”, con Brasil, Alemania, Francia y Reino Unido en el radar.