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Goirigolzarri rechaza el uso de “medidas de corto plazo” para paliar la falta de vivienda

El presidente de CaixaBank identifica a la vivienda como uno de los grandes retos de España, junto con la demografía y la educación

Caixabank
José Ignacio Goirigolzarri, presidente de CaixaBank, en una imagen de archivo tomada durante el 45 aniversario de CincoDías.Pablo Moreno

El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, consideró este miércoles que al déficit “extraordinario” de vivienda en España “no podemos responder con medidas de corto plazo” ni “estigmatizar” a los fondos.

El máximo responsable de la entidad participó en un acto organizado por la Fundación PwC en el que citó los tres retos “urgentes” e “inminentes” que tiene por delante España: la demografía, la vivienda y la educación.

Sobre la vivienda, Goirigolzarri explicó que hay un desacople entre oferta y demanda que va a ser “dramático” a futuro, pues los hogares crecen a un ritmo que más que duplica el de los visados para construir.

“A eso no podemos responder con medidas de corto plazo, máxime cuando inciden en desequilibrios estructurales en el medio y lago plazo”, opinó Goirigolzarri. A esto añadió que la colaboración público-privada para impulsar la vivienda “hay que concretarla” y se necesita una agilización de permisos y licencias, “allegar capital nacional y extranjero y eso es todo lo contrario a estigmatizar” a los fondos y “seguridad jurídica”.

Sobre el reto de la demografía, el presidente de CaixaBank repasó que la población española se ha incrementado en 1,1 millones de personas en los dos últimos años por la llegada de los extranjeros, ya que los nacionales han bajado y las proyecciones de Estadística apuntan a un incremento de 700.000 personas en los próximos años. Según destacó, “esto está teniendo una incidencia económica muy positiva” y el boom del turismo no se explica sin los extranjeros.

Al mismo tiempo, destacó que hay una falta de mano de obra en las empresas y un envejecimiento de la población “absolutamente rápido”. Con ello, concluyó que la inmigración “es una necesidad para el mantenimiento del Estado de bienestar y para desarrollo pero tiene unos retos sociales extraordinarios que es la cohesión y la necesidad que tenemos de integrar”.

Respecto a la educación, Goirigolzarri avisó de que el “desequilibrio” en el mercado laboral entre oferta y demanda “va a seguir profundizándose en el tiempo” si no se incorporan nuevas habilidades. Además, resaltó que los “fallos” en el sistema educativo “son conocidísimos”, apuntando a la formación profesional y a las políticas activas de empleo. “El 80% de la desigualdad en España está generada por el desempleo”, afirmó, con lo que instó a “luchar por la educación”.

Goirigolzarri también habló del marco europeo y lanzó otro mensaje en clave política al señalar que los desafíos económicos “tienen como condición necesaria enfrentarse a desafíos políticos” y el fraccionamiento del mercado “pasa necesariamente por decisiones políticas”.

En este punto, afirmó que el hecho de que 12 años después de iniciar la unión bancaria ésta no se haya terminado con la creación del fondo único de garantía de depósitos “es una decisión política” y la emisión de activos mutualizados, como propone Mario Draghi en su reciente informe, también es una decisión política.

Goirigolzarri apostó por hacer pedagogía “permanente” de la integración europea, porque “la alternativa a todos estos retos es la irrelevancia de Europa en el mundo y en el medio y largo plazo, la imposibilidad de financiar y mantener el Estado del bienestar”.

Igualmente, apeló al crecimiento en Europa precisamente para “mantener el Estado del bienestar” y para ello, reclamó una “estrategia global de crecimiento” y no fraccionada por países.

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