El mercado eléctrico español vuelve a precios negativos con las renovables por encima del 80%
Las energéticas pagarán un céntimo de euro por cada kilovatio hora que inyecten a la red entre dos y las cuatro de la tarde del viernes. Los consumidores, en cambio, tendrán que hacer frente a los cargos y peajes
Los precios negativos en el mercado eléctrico español no son flor de un día. Tras el episodio del lunes, cuando los productores tuvieron que pagar por inyectar su energía en la red por primera vez en toda la serie histórica, los valores negativos impondrán de nuevo su ley entre las dos y las cuatro de la tarde de este viernes, según las cifras adelantadas por el Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE), el organismo que se encarga de casar las ofertas mayoristas. Como a principios de semana, la cifra será mínima: un céntimo por kilovatio hora (KWh).
Que la luz caiga a valores negativos no quiere decir que los consumidores finales vayan a cobrar por la electricidad que consumen. A falta de que Red Eléctrica de España (REE) publique la tabla de precios de este viernes para los hogares y pymes acogidos al mercado regulado (PVPC), el precedente del lunes puede servir: en los tramos horarios en los que el mercado eléctrico se fue a números rojos, estas familias y empresas abonaron unos cuatro céntimos por KWh. Una cifra mínima, pero muy similar a la de las horas en las que el precio mayorista está en cero y vecinos. La diferencia entre el mercado mayorista y el PVPC radica en los cargos y peajes, con los que los consumidores sufragan tanto la inversión y el mantenimiento de la red como los pagos de las antiguas renovables.
El principal factor detrás de esta brutal caída en el precio de la luz es, una vez más, el aluvión de generación renovable y la caída de la demanda. Este viernes, la suma de la eólica, la hidráulica y la solar superará con holgura el 80%, según las previsiones de OMIE, en las que no se incluyen los ajustes para equilibrar la oferta y la demanda hora tras hora. Un rubro en el que las centrales de gas suelen desempeñar un papel importante, reduciendo la cuota final de las energías limpias.
Los 0,44 euros por MWh de media diaria este viernes suponen la quinta cifra más baja de toda la historia del mercado eléctrico español. El precio rondará los cero euros (céntimos arriba o abajo) en 20 de los 24 tramos horarios de la jornada, y en el momento más caro de la jornada, entre las siete y las ocho de la mañana, se superarán por poco los tres euros, una cifra irrisoria en la mayoría de días del año. Por poner en perspectiva estos precios, en marzo de 2022, el mes más caro de la historia, llegó a promediar 283 euros por megavatio hora.
Viento, sol, agua... Y efecto arrastre del resto de Europa
Entre las dos y las cuatro de la tarde, las horas en las que caerá por debajo de cero, las renovables cubrirán casi el 85% y el 82% de la demanda. Serán, además, los únicos dos tramos de la jornada (junto con el inmediatamente posterior) en los que están programadas importaciones de electricidad desde Francia, lo que aviva la teoría de que —más allá de la enorme generación verde, una de las mayores del Viejo Continente— estos valores negativos también tienen mucho de efecto contagio de lo que ocurre en el resto de Europa. A esa hora, además de en España y Portugal el precio de la electricidad caerá por debajo de cero en Francia, Bélgica y, sobre todo, en Países Bajos, donde se alcanzarán los 15 euros negativos.
Más allá de estos incipientes números rojos en el precio español de la luz, la dinámica de fondo del mercado es la de un coste cada vez más bajo de generación. Esta tendencia, que empezó con los buenos registros recientes de eólica (por la sucesión de borrascas y días ventosos) y fotovoltaica (la tecnología en la que más está creciendo la potencia instalada), se ha visto acelerada en los últimos días por la actividad inusualmente elevada de las centrales hidroeléctricas, espoleados por las lluvias y por la apertura obligada de compuertas por orden de las confederaciones hidrográficas.
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