Cellnex acelerará el recorte de costes para alcanzar antes el grado de inversión con S&P
El grupo buscará rebajar todo lo posible los gastos financieros y laborales
Cellnex decidió a final del pasado año poner en marcha una nueva etapa estratégica para adaptar su estructura de capital con prioridades claves como impulsar el crecimiento orgánico, alcanzar el grado de inversión con S&P, y maximizar el valor para los accionistas. El gigante europeo de las torres de telecomunicaciones trazó como objetivos la generación de caja y la reducción de deuda, en un periodo de subidas de los tipos de interés. Para lograr estos objetivos, Cellnex también va a trabajar en la reducción de costes, política que deberá aplicar el futuro consejero delegado.
En un reciente encuentro con los representantes de los trabajadores de las filiales españolas Retevisión, Tradia y On Tower, los responsables de Cellnex destacaron la estrategia de crecimiento orgánico, que pasa por optimizar los negocios, mejorando su retorno en lo posible. Los directivos indicaron que, aparejado a este cambio de política, la compañía va a proceder a bajar en lo posible los costes financieros y laborales, impulsar una política de compras más centralizada, junto con otras medidas de ahorro.
El objetivo temporal para que la empresa entre en beneficios se ha situado por la dirección en 2025.
En términos generales, los costes operativos de Cellnex aumentaron en 2022 en torno a un 41%, desde 615 a 868 millones de euros. El incremento, no obstante, está alineado con la estrategia de crecimiento inorgánico de los últimos años, con múltiples adquisiciones, que han impulsado una ampliación del perímetro de consolidación. De hecho, los ingresos también aumentaron un 38%, hasta 3.499 millones. Entre otras transacciones, Cellnex cerró en 2022 la compra de las torres de telefonía de Hutchison en Europa, con la culminación de sus infraestructuras en Reino Unido.
Entre otros capítulos, los costes de plantilla subieron un 22%, hasta 254 millones de euros; los de reparaciones y mantenimientos un 16%, hasta 92 millones; utilities, un 78%, hasta 283 millones; y costes generales y otros servicios, un 42%, hasta 240 millones.
En la presentación de los resultados de 2022, el grupo destacó que el opex se situó significativamente por debajo de la inflación gracias al programa de eficiencias, gracias a los mecanismos que ayudan a controlar la subida de los precios de la energía, que se transmiten a los clientes.
Los costes operativos, no obstante, podrían seguir aumentando durante este año, como consecuencia del efecto arrastre derivado del citado crecimiento del perímetro de consolidación por las compras.
Proveedores
Este factor sí sería positivo con respecto a la citada política de mayor centralización de las compras. El hecho de que Cellnex haya crecido hasta el tamaño que tiene ahora, con operaciones en 12 países, permite a la empresa tener una mejor posición negociadora frente a sus distintos proveedores de equipos y servicios.
Con respecto a la reducción de los costes salariales, Cellnex ya ha aprobado en los últimos años distintos expedientes de regulación de empleo (ERE), con carácter voluntario, para adaptarse a los nuevos negocios.
El último se acordó con los sindicatos en España en diciembre de 2021, que incluía la salida de 208 personas de las filiales Retevisión, Tradia y On Tower, entre 2022 y 2025. La compañía señaló que las eficiencias en otros gastos de explotación “opex” deberían empezar a materializarse a partir de 2025.
En su informe anual, la empresa recuerda que este plan de regulación de empleo se provisionó a 31 de diciembre de 2021 con un coste de 81 millones de euros. En 2022, tras la ejecución de parte de este acuerdo, extinguieron contratos a 80 empleados con un coste asociado de 23,7 millones. El saldo a pagar a 31 de diciembre de 2022 asociado a este procedimiento de despido colectivo llevado a cabo representa pagos esperados por importe de 33,4 millones y 17,7 millones registrados a largo y corto plazo, respectivamente.
Con anterioridad, en 2018, Cellnex acordó otro ERE en España para extinguir hasta 175 contratos.
Cellnex también tiene en marcha un plan de sinergias y eficiencias para el periodo entre 2021 y 2025. Según comunicó la empresa a los inversores, el programa está cumpliendo los plazos para generar unas eficiencias entre 90 y 100 millones de euros hasta 2025. La compañía destaca factores como la renegociación de alquileres o la compra de espacios.
La intención de la compañía pasa por consolidar el grado de inversión con S&P antes de final de 2024. Con el cumplimiento de ese objetivo, Cellnex prevé una reducción de sus costes financieros. La empresa tiene una deuda de 16.900 millones de euros, de los que el 77% son a tipo fijo. A principios de este año, el grupo acordó la refinanciación de un préstamo de 700 millones, con una veintena de bancos. El nuevo préstamo, con vencimiento en 2028, tiene un tipo de interés de Euribor más 1,2%, con el que la empresa va a registrar un ahorro de 10 millones al año.
A la espera de la llegada del nuevo CEO
Cambio. Cellnex sigue trabajando en la llegada del nuevo consejero delegado, que sustituya a Tobías Martínez, cuya salida está prevista para el próximo 3 de junio. El nombramiento debe ser aprobado por dos tercios del consejo de administración, que, hasta ahora, no se ha puesto de acuerdo para la elección. El panorama, en cualquier caso, se ha aprobado tras la dimisión de los consejeros independientes, Bertrand Kan (anterior presidente. sustituido a final de marzo por Anne Bouverot) y Peter Shore, quienes habían recibido fuertes críticas por parte de TCI, el fondo del inversor activista Chris Hohn, que se ha convertido en el primer accionista.
Consejo. De esta manera, el consejo ha quedado con dos plazas vacantes. En este sentido, TCI reclamó un representante en el citado órgano de gestión, para su directivo Jonathan Amouyal. Tanto TCI como Edizione, el holding de la familia Benetton, han apoyado a Marco Patuano, ex consejero delegado de Telecom Italia así como de la propia Edizione, como nuevo CEO de Cellnex. El grupo tiene previsto presentar los resultados del primer trimestre el próximo 27 de abril. De momento, los mercados financieros parecen confiar en la resolución de esta situación. Las acciones de Cellnex se han revalorizado más de un 23% desde principios de año, recuperando la cota de los 38 euros.
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